41. Futuro y decisiones.

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—Dios, este calor es infernal. Trágame tierra y escúpeme en el polo norte.

—¿No te congelarías allá?

—Prefiero morir hecha un cubito de hielo que calcinada. Ni siquiera hay un ventilador que se lleve todo este vapor.

—Bueno, es verano después de todo. Lluvia y sol hacen equipo.

—Por suerte falta poco para la graduación. Solo tengo que soportar hasta entonces.

—Sí, sobre eso... ¿qué vas a hacer cuando nos graduemos?

—Umh, ¿ir casa?

—Tonta, me refiero a tu futuro. ¿Qué es lo que quieres estudiar?

—Ah, eso. Supongo que Idiomas Modernos está bien para mí.

—¿Idiomas?

—Sí.

¿Desde cuando ella...?

—¿Y tú, Fer? ¿Qué quieres hacer después de graduarte?

—Uh, no lo sé.

—¿Aún no lo decides?

—No es eso. Yo... estoy considerando ingeniería civil, pero... ya he investigado y no la ofrecen aquí.

—Ah... ¿No quieres dejar a tu abuelo? 

—No quiero alejarme de mi hogar.

—Fer...

...

—Escucha. Tal vez tú no lo veas así, pero creo que no deberías preocuparte demasiado. No conozco a tu padre, pero si se trata de tu abuelo, sé que él va a estar bien. Él te apoya y... yo también.

¿Y tú? ¿Vas a estar bien?

—Piensalo un poco más, ¿quieres? Solo no te limites por otras personas. Tienes que ir por lo que te hace feliz.

—Lo que me hace feliz...

...

—Igual, si al final no te decides, siempre podemos convertirnos en socios y abrir un puesto de perritos calientes.

—Vaya oferta, pero no.

—Aburrido.

Carol, ¿Por qué me acosas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora