¡Él es el ideal!

U N O

ㅡ¡Querida, te llama la jefa! ㅡgrita Mark mientras baja las escaleras corriendo, él siempre tan peculiar.

ㅡ¡Dile que ya va! ㅡrespondo, antes de subir, dejo todo mi escritorio en orden.

Acomodo mi cabello y mi traje, conozco a Rebeca desde hace un buen tiempo, pero nunca está de más.

Entro a su oficina, ella me indica que me siente, tomo una de las sillas.

ㅡSofia, te conozco de la universidad prácticamente, sabes que te tengo una confianza absoluta, también sé de tus ganas de progresar y por eso quiero proponerte...

Sonrío, ansiosa a lo que dirá.

ㅡSupongo que sabes que quiero abrir un estudio en la ciudad y quería proponerte si quieres manejarlo, tu salario aumentará bastante y te daré uno de mis departamentos para que puedas vivir tranquila, puedes preguntarme lo que sea, ¿qué dices?

Mi sonrisa se va, es una gran oportunidad para mí, tengo treinta años y si no próspero ahora, ¿cuando lo haré? Pero... ¿Y Ethan? Mi casi esposo, ya comenzamos con los preparativos, una de las personas que me han sido más fieles. Trabaja aquí y no creo que pueda irse...

ㅡNo... no puedo. ㅡMe duele cada palabra, pero es la realidad.

ㅡSofi... No te veo muy convencida con lo que estás diciendo, tengo unos días para la decisión, así que piénsalo bien y luego me dices.

ㅡGracias Rebeca. Lo tengo que hablar.

Al menos tengo una oportunidad más. Ojalá la pueda aprovechar. Bajo a mi esritorio, guardo mis cosas en la mochila y me dirijo a mi auto, debería terminar el último plano que me queda en casa y ya podría dedicarme totalmente a la boda.

Volviendo a Ethan... Que persona que hace que mi mundo de vueltas, es lo más dulce que puede haber, supongo que debe estar trabajando, tendré tiempo para acomodar los recuerdos que se darán, solo falta un mes y medio.

Mi teléfono suena, al sacarlo de mi bolsillo, veo quien es, otra de las mejores personas que conozco, Mia. Mi mejor amiga desde que tengo memoria. Se mudó a Nueva York, una de las ventajas que tendría es que la vería todos los días y es algo que necesito demasiado, hay dos horas de viaje y no las podemos hacer todos los días.

ㅡ¿Y cómo está la futura novia? ㅡBromea.

ㅡMuy bien, pero no sabes que me pasó... ㅡDejo un poco de suspenso.

ㅡ¿¡Qué!? ㅡpregunta no dejándome terminar lo que decía.

ㅡMi jefa me dijo que quería que maneje un nuevo estudio que abrirá y, ¿sabes dónde es? ¡En Nueva York!

Se escucha un grito de felicidad. -¿Y qué le dijiste? ¿Que sí?

ㅡDebo pensarlo... No sé si Ethan pueda.

ㅡ¡Si no puede ven tu sola! Volvemos a los viejos tiempos ㅡgimotea.

ㅡDe cualquier manera, debo pensarlo. Sabes que si fuese por mí ya estaría ahí, pero... No sé...

ㅡ¡Lo obligas! Bueno amiga, debo irme, tengo pacientes por atender. ㅡCorta la llamada.

Comienzo a manejar, ojalá fuese todo así de fácil, pero las decisiones son de a dos.

***

ㅡHogar dulce hogar ㅡmurmuro con felicidad.

Muevo algunas para poder caminar tranquila, al dejar de hacer el poco ruido, escucho sonidos... muy peculiares, de una mujer.

Solo voy a pensar que es el hermano de Ethan que le pidió la casa y no me enteré de nada.

Camino lentamente, cada vez me voy dando cuenta de lo que está pasando y todo empeora, a niveles extremos, cuando escucho la voz de Ethan.

Mi cabeza llega a un punto en el que no siente nada, tengo el impulso de abrir la puerta de un golpe y sí, era lo más obvio... Me estaba siendo infiel.

ㅡMaldito hijo de...