Capítulo 29
Noches de Tormenta
(CAPITULO HOT)
Sabía que la pelota estaba aquí, había visto como mi papá me la había quitado y guardado en el cobertizo como castigo por romper el jarrón favorito de mamá.Pero yo quería la pelota para jugar.
La tarde estaba oscura, nubes negras cubrían el cielo. De seguro una fuerte tormenta venia en camino, pero debía recuperar mi pelota antes de que empezara a llover.
Entre en el cobertizo de papá, que también estaba oscuro, pero estaba demasiado pequeña para alcanzar la lámpara, debía buscar en la oscuridad la pelota.
Empecé a revisar entre las viejas cajetas que cubrían el suelo y la encontré en el fondo junto a viejas cajetas. Sonreí feliz al tener mi pelota nuevamente en mis manos.
Y entonces una fuerte ráfaga de viento azoto el cobertizo cerrando la puerta junto a un luminoso y estruendoso trueno.
Salte asustada soltando la pelota de mis manos y corriendo hacia la puerta. Estaba cerrada. Más truenos iguales o más fuertes empezaron a caer y cada uno me hacía temblar más que el anterior. Necesitaba salir de aquí rápido, pero la puerta no estaba cediendo.
Empecé a gritar por ayuda, pero apenas el primer grito salió, así mismo fue la ruidosa y fuerte tormenta, que venía combinada con más y más rayos.
Mis gritos se fueron apagando a medida que pasaban los minutos u horas, solo que después de un buen rato deje de esforzarme, puesto que la lluvia aumentaba más. Sentándome en un pequeño rincón del cobertizo, me largue a llorar del terror.
-¡Marianne!
….
-¡Marianne!
….
-¡Marianne!
-Marianne- sentí unas frías manos tocar mis temblorosos brazos. Salte asustada, sollozando más fuerte- Shh, soy yo…. Alex- mírame- aún seguía temblando cuando alce el rostro para encontrarme a él cuerpo empapado de Alex, mirándome con los ojos rojos. Solloce aún más fuerte mientras me abalanzaba sobre él
-Yo solo quería jugar la pelota- dije entre sollozos
-Todo va estar ben- dijo Alex abrazándome- Ya todo acabo
-¿Marianne…?- creo que escuche mi nombre a lo lejos, pero no podía alzar la mirada, estaba demasiado concentrada en no enloquecer
Otro relámpago y un nuevo espasmo
-¡Marianne!- ¿Ese era Emanuel?- Oh por Dios, Marianne. ¿Estás bien?- Emanuel llego junto a mí y se agacho- Princesa ¿Qué paso?- no levante la mirada, no quería ver los relámpagos- Marianne, mírame soy yo, Emanuel
Lentamente alce la mirada y lo mire. Era un mar de llanto y mi visión estaba un poco borrosa, pero pude enfocar el rostro preocupado de Emanuel.
-Es la tormenta ¿Cierto?- yo asentí- Ven acá- Emanuel me trajo a su pecho abrazándome- Shh, todo va a estar bien- susurro en mi oído. Yo lo abrace como si de eso dependiera mi vida. Él me sostuvo un rato y luego sentí como me levanta en estilo novia y me estrechaba contra su cuerpo. Yo me aferre a él, como si fuera mi soporte.
Me llevo cargada hasta el segundo piso, específicamente hacia su habitación. Me recostó sobre su cama y me envolvió con su manta. Luego fue a cerrar las ventanas y volvió a la cama.
-Ya vuelvo- coloco un beso en mi frente y luego salió de la habitación.
Otro trueno retumbo, pero esta vez no se vio, gracias a las oscuras cortinas de Emanuel. Jamás iba a volver a quejarme de esas cortinas. Tome la manta y la lleve hasta mi cabeza. Estar así, me reconfortaba un poco, pero aun el contante sonido de trueno, afuera me hacía estremecer.
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Mi Convivencia Con Los Sexys Chicos Almanza: Parte 1
عاطفيةEllos son 3 chicos. El idiota, el amigable y el amoroso. Y yo, por otro lado, soy la chica que tiene el desafío de convivir con ellos y además de averiguar de cuál de ellos esta de verdad enamorada. ...