Capítulo 10 <02>

3 1 0
                                    

-¿Me vas a dejar de seguir o qué? -Me preguntó Lesly frustrada volteando hacia mí -Quien te paga ¿Mi padre?

-No solo me complace hacerlo.

-Mira Sergio yo no tengo paciencia para tus tonterías, o te vas o yo misma te mando a la mierda -Avisó amenazante con los brazos en jarras.

-Bien, solo dime dónde vas.

-A trabajar.

-Comprendo, buen iré a dar una vuelta -Dije volteándome y caminando varios pasos, cuando la vi seguir su camino retomé la persecución, era divertido. 
Entró a lo que parecía un bar bastante tropical, fui dentro y me coloqué en la barra, tras unos minutos apareció ella ahora con una camiseta azul de tirantes gruesos que decía el nombre del lugar, mi mirada se detuvo en la zona del busto.

-Que plana es esta mujer.

-¿Disculpa? -Dijo frente a mí molesta -Dos cosas; Número uno, que haces aquí se supone que me dejarías de seguir, número dos, no... bueno sí soy plana, pero no puedes venir a decírmelo en la cara, ten algo de empatía.

-Pero si tus pechos pequeños como media naranja, ni siquiera hace una entera.

-Sergio más te vale irte o yo te voy a...

-Voy a comprar -Fue lo único que se ocurrió.

-Bien pide y vete de la barra.

-¿Por qué?

-No quiero ver tu cara.

-Dame una cerveza -Ella la tomó de uno de las cámaras de enfriamiento y la destapó para dejarla frente a mí -Listo.

-¿Por qué actúas así? Solo te protejo.

-No me siento nada segura contigo.

-¡Auch!

-Vete.

-No.

-Te ficharé de acosador y te prohibirán ingresar.

-Bien -Indiqué antes de abandonar ese espacio rumbo a alguna de las mesas -¡No me siento segura!, ¡Ridícula!.

Lesly.

Salí fuera del local, ya daban casi las diez de la noche, solo quería llegar al apartamento y dejarme caer sobre mi habitación.

-¡YA BASTA DEJA DE SEGUIRME! -Me di vuelta furiosa encarando a el cretino este que caminaba siempre a un metro detrás de mí, me ponía nerviosa y... paranoica.

-No -Indicó simple Sergio -Me agrada seguirte.

-¡A MÍ NO! -Dije para continuar mi ruta seguida de él, lo sentí muy cerca, colocó las manos de mis hombros y me impidió voltear -¿Qué pasa?

-Hay un tipo que nos sigue desde hace una cuadra, creo que planea asaltarnos, no te alejes -Susurró nervioso -Tal ves no se anime a hacer nada si somos dos -Temblé nerviosa, a diferencia de toda mi familia demente, yo era la hija inútil que no sabía ni tomar un arma, menos defensa personal -Tranquilizante Lesly, actúa normal.

-¿Se acercó mas?

-No pero aún nos sigue -Me acerqué más a él, era hijo de Graham, supongo que al menos sabrá golpear bien, él soltó mis hombros repentinamente y voltee asustada, lo encontré detenido mirando alrededor.

-¿Se fue?

-¿Decías que no te sentías segura conmigo? -Indicó con orgullo.

-¿He? -Dije tonta, él dibujó una sonrisa en su rostro.

¿Era una broma?

-Yo te vi muy confiada en mí para protegerte.

-¿Enserio Sergio? ¡No se bromea con algo así! -Dije con los ojos cristalizados, quería sentir enojo pero todo mi cuerpo temblaba como gelatina que recibió un empujón.

-Lo lamento no pensé -Dijo intentando acercarce de manera precavida, yo ni voluntad para darle un puñetazo tenía ya, él colocó su mano en mi hombro -No quería hacerte sentir mal, tan solo parecía buena idea y...

-Déjame en paz Sergio, no sabes nada de mí y pretendes cuidarme -Dije tomando una pizca de sensatez mental, pero mi cuerpo aún no asimila que no había amenaza real -Sabiendo que mi padre es lo que es crees que decir algo así resultaría un chiste vano, es con mi vida la que juegas -Sin saber de donde tomé fuerzas y empecé a caminar de nuevo, ni siquiera voltee para ver si me seguía, pero oía sus molestos pasos a un metro de distancia.

  Desperté bastante mejor en la mañana, pero sentía que no podía respirar, abrí los ojos y encontré el rostro sonriente de Sergio sobre mí, bueno todo él me aplastaba.

-No res-piro -Dije en dos espacios de voz, que le pasaba a este tonto.

-Buenos días -Dijo apartándose junto a mí, miré para darme cuenta que Camelia ya no ocupaba el espacio opuesto de la cama.

-Tenias que asfixiarme.

-Era divertido.

-¿Qué hacen? -Habló mi mejor amiga desde la puerta con el ceño fruncido -Ya hay desayuno, solo tenías que avisarle eso -dio vuelta y se fue, Sergio rodó los ojos.

-Bien -Dije mirando hacia la nada, sentí la cercanía de la mano de ese tarado y la golpee a tiempo -¿Qué te pasa?

-Yo solo...

-Ibas a tocarme una teta.

-Quería ver si tenías algo o solo era puro sostén.

-ERES UN IDIOTA -Brinqué sobre él y intenté orcarlo, dure unos segundos hasta que alguien me levantó rodeada por la cintura, era el Señor Graham, que vergüenza.

-¿Qué pasa aquí? -Preguntó abrumado viendo como su hijo mayor se sobaba el cuello adolorido - Estas Roshawna son agresivas -Por el rabillo del hojo visualicé a Camelia preocupada en la puerta, ni siquiera sé que hacía Mucio aquí, el había quedado de dormir en el sofá de la habitación que alquilaron Ivory y Tiziano, bueno eso luego de que Sergio básicamente le negara el de este apartamento para ocuparlo él -¿Por qué ahorcabas a mi hijo?

-Olvídalo papá -Dijo con voz áspera el mencionado -Mejor vamos a desayunar -El sujeto me dejó en el suelo y de mala gana me dirigí a la cocina, era un completo imb... ¿Cómo se le ocurría decirme eso? ¿Qué le pasaba? ¿Acaso querían volverme loca? ¿Acaso será un plan de papá para que vuelva con él? Pues puede meterselo por el...

  Olvídalo, creo que solo me estoy volviendo paranoica otra ves.

  Debo tomar sensatés, tonterías no pueden desconcentrar mi muevo proyecto de vida, una vida tranquila en Brasíl.

El dilema de los Graham. (Está en corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora