~My dear friend~ / Alastor x Tu (TERMINADA)

Capitulo 7

"Tan oscuro como lo desconocido"

Narrador

Alastor quedó en silencio ante la respuesta de Alma, sospechaba que ella había abortado al niño y por eso había llegado al infierno. Era claro que el aborto no era  tema favorito de Dios, siempre castigaba a las mujeres que no permitían que nacieran esos niños que él mismo envíaba a la tierra para que tuviesen una familia. La muchacha al ver el rostro pensativo de Alastor, pero con su sonrisa aún presente en él comenzó a inquietarse, pues era perturbador que esa sonrisa tan grande te estuviese viendo fijamente a la cara sin decir palabra alguna.

- ¿Él sabía? - preguntó viendo a la chica, ella escondió su mirada y negó con la cabeza. El último en saberlo debía de ser su tío, eso estaba claro.

El muchacho de cabello rojo comenzaba a plantear la situación de la chica. Una joven que fue abusada desde que era una niña, y luego terminó embarazada de su tío, ¿Merecía realmente estar en el infierno?.
Alastor estaba en una lucha interna, pues disfrutaba de manera sobrehumana ver el fracaso de las personas, tanto en su vida como en su "no-vida", pero con Alma era distinto. Sentía que algo no encajaba, había una pieza que faltaba y la curiosidad le estaba jugando una mala pasada.

- Querida...- volvió a hablar rompiendo el silencio llamando la atención de la chica obligandola a que lo volviese a ver - ¿Recuerdas cómo fue tu muerte? - Alma quedó inmovil ante tal pregunta, pues no ha tenido tiempo siquiera de pensar en eso.

- Yo...solo recuerdo que me dolía el cuello...y mi cabeza... - respondió la joven mientras trataba de recordar, pero sentía su mente nublada y cada vez que trataba de distinguir lo que había sucedido, esas imagenes en su cabeza iban alejandose más y más.

Alastor pensaba que esa podría ser la respuesta de la muchacha, pero tenía otra propuesta para Alma, de esa forma podría descubrír la forma en que murió la chica.
Pero el demonio ¿Qué ganaba haciendo todo esto?, no ganaba absolutamente nada. Estabs tan aburrido de su vida monotona que usaría esta pequeña oportunidad para tratar de encontrar algo de diversión, aunque no podía negar que la curiosidad hacia la chica no era solo diversión. La magnitud y pesar de los horrores que debió enfrentar aquella joven durante casi toda su vida le atormentaba un poco.

- Tengo una propuesta para ti, dejame volver a tus recuerdos para saber cómo fue que terminaste aquí, Sweetheart - Alastor irradiaba con emoción su sonrisa, tenía la esperanza de ver a la chica cometiendo suicidio vencida por los horrores de la vida, viendola caer y perder ante sus propios pasados, solo para alejar esos gritos de ayuda que aún seguía rondando por su cabeza.

La muchacha observó dudosa de la propuesta del demonio, pues no estaba segura de poder controlar esa "habilidad".

- Quizas no veas solo eso, no sé cómo usar esto - respondió avergonzada la joven, tenía tantos fantasmas en su pasado que temía terminar aún peor parada respecto a cómo fue en su vida.

- Oh my darling...¿No crees que sí estoy aquí no fue por haber sido una buena persona allá arriba? - respondió Alastor apuntando sobre sus cabezas hablando de los vivos.

Alma razonó lo que trataba de decir Alastor, se comenzaba a preguntar cuales fueron sus pecados, pero al recordar lo sucedido antes con él se omitió toda pregunta.

- Está bien - respondió la chica seguido de un suspiro.

- Ahora...sí me permites - Alastor apoyó sus manos en el rostro de la chica para verla fijo a los ojos mientras los de ella se clavaban profundamente en los de él.

Alastor

En cosa de segundos volví a esa habitación, me sorprendí a ver a esa chica de catorce años caminando de un lado a otro dentro del cuarto con una de sus manos tomando su cabeza.