Hana Haki Byōki [Muzan x Tanjirou] «Terminada»

•|Capítulo 20|•

Suave, tibio y cálido a la vez, es hermoso, ya no tiene pesares. Se siente en un mar eterno, suave y cálido, azul y rojo confundidos.

Azul y rojo...Azul y Roj...

—¡Tanjiro!, ¡Despierta!, ¿¡Qué mierda haz hecho!?

Pero se sentía tan bien dormir así, no quería levantar, no quería verle el rostro nadie más, solo quería flotar en su propia miseria.

Pero todo se tiño de negro.

Muzan le ha enterrado una garra en el ojo.

El cosquilleo en su cien le es muy agudo, no siente dolor, pero si unas enormes ganas de despertar. Con pereza lo hace y se siente extrañó, ¿Dónde está?

—Qué bueno que al fin despiertas

Y los brazos De una mujer lo rodean, cálido, casi como si el dolor no existiera. Sus ojos le pican y quiere llorar, ¿Por qué?, No lo sabe pero aun así se aferra a sus delicadas prendas y llora con fuerza. Su garganta pica y demasiado, sigue llorando y a esa bella mujer no le importa que sus mocos queden pegados en sus ropas. Sonríe, porqué Tanjiro se aferra más a ella.

— ¡Lo siento!, ¡Lo siento!, ¡Lo siento!

¿Pero porque lo sentía?, no lo sabía, sin embargó Tanjiro lloraba cuál niño pequeño en sus brazos.

Esa misma noche Muzan dedujo qué Ese Tanjiro tenía sentimientos residuales de cuándo era Humano, por lo que solamente sentía el sentimiento de las cosas.

Por eso mismo lloró en sus brazos.

Tal y como aquella vez.

— ¿Entonces mi nombré es Tanjiro Kibutsuji?

Muzan asintió, peinando sus cabellos y tranquilizándolo, pues parecía un niño pequeño qué necesitaba que le explicasen varias cosas de la vida.

— ¿Entonces tu eres mi madre?

Muzan negó, tranquilo y apacible, indeciso de mostrar su apariencia frente al Kamado.

—Ummm, Esta bien, supongo

Tanjiro se miró las manos, teniendo una pequeña visión, viéndolas llenas de sangré.

—Es hora de Dormir

Continuará