Que empiecen las fiestas.

18 3 0
                                    

El mes se había pasado relativamente rápido, había vuelto a quedar con Vet aunque ahora que Erik y ella salían estaba algo más ocupada. Tampoco me importaba ya que pasaba prácticamente todos días en el rancho de Stefan con Black Heart y aparte ayudando a sus padres con todos los preparativos para la gala de navidad. A mis padres parecía haberles quedado bastante claro que quería más independencia de echo la idea de irme a vivir sola estaba empezando a tentarme. Pero la casa de mi madre me encantaba y últimamente me sentía bastante cómoda teniéndola solo para mí.

Este año iba a ser el primero que no pasaría las fiestas en casa de ningún familiar, a mis padres no les hizo mucha ilusión, pero me daba igual. Había vuelto a coger confianza a la hora de conducir a sí que ya no dependía de nadie para moverme. Podía caminar perfectamente sin ayuda de nada e incluso hacía más ejercicio que antes. Ya no iba tanto a la escuela de danza desde que recobré la memoria, no quería volver a tanto sacrificio, pero cuando estaba sola en casa bailaba. Tampoco quería forzar mucho pero recordaba todos los pasos de ballet y baile contemporáneo. Después de haber estado trabajando un poco la flexibilidad y hacer algunos ejercicios decidí ir a ver a Black.

El rancho se estaba quedando precioso, habían adornado todo por fuera, con luces y todo tipo de adornos los cuales pegaban mucho con el lugar, la mayoría de las esculturas estaban hechas de ramas con lazos rojos y luces por dentro o alrededor. Como ya había nevado la estampa del decorado y todo blanco era un espectáculo increíble sin contar los animales corriendo felices por los campos.

-¿Cómo estas chico?

Le pregunté a Black mientras hacia un pequeño relincho en forma de saludo. Al haber pasado tanto tiempo encerrado por sus terribles lesiones, le estaba saliendo una infosura en una pata trasera... A sí que aunque el veterinario aconsejo no sacarlo todavía no podía esperar... Le puse la cabezada y lo saqué con cuidado. Como el pobre cojeaba no hacía ningún feo para intentar salir corriendo. Sin embargo sí que estaba muy nervioso por volver a salir, se le notaba en la respiración y miraba a todos los lados pero aun así no quería volver dentro, necesitaba caminar, volver a recuperar toda la musculatura que había perdido. Por suerte no estaba muy delgado ya que tenía una buena alimentación.

-He preparado un sitio nuevo para Black... por si no quieres volverlo a dejar en esa cuadra.

Dijo Stefan animado mientras le seguía para ver a que se refería. Detrás de la casa tenían bastantes prados con caballos, algunos estaban solos y otros en compañía. Cada prado tenía una gran caseta con cuatro paredes y un buen techo para refugiarse. Donde debería de estar la puerta había medía pared con una ventana y el resto abierto. Stefan me señalo uno de los prados que estaba vacío pero al lado de este tenía compañía de más caballos, así que realmente no estaría solo y podría tener más contacto con los otros. A parte tenía un gran árbol, ahora sin hojas por el frio, pero en verano tenía pinta de ser muy frondoso y dar buena sombra. Stefan había preparado la cuadra por dentro con serrín y paja para que usase de cama, ya que a Black le gustaba tener ese mix para tumbarse. El abrevadero y comedero eran nuevos, a parte en la parte del prado también tenía ambas cosas y suplementos con sales repartidos por el lugar. Asentí levemente con una sonrisa de oreja a oreja.

-Aquí estará mucho mejor sin duda.

Lo solté para ver que hacía y se fuera acostumbrando un poco a su nuevo hogar. Lo primero que hizo fue acercarse poco a poco a sus nuevos vecinos para olerlos y relincharles un poco. Se puso a oler la nieve y a rascarla con el morro. Siempre le había gustado la nieve y revolcarse en ella, cosa que también intento, aunque por culpa de sus lesiones le costaba bastante moverse en general. Esperaba que con el tiempo volviera a estar como antes...

-Muchas gracias... parece que le gusta este sitio.

Le dije con sinceridad. Black Heart estaba en la gloria. Despues de estar un rato viendo lo que hacía. Como olisqueaba y se intentaba rascar con algunas cosas, se metio dentro de la cuadra a comer un poco de alfalfa y heno.

Black HeartWhere stories live. Discover now