Casualidad

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-¡BASTARDOS!-

Al abrir los ojos Serena vio a alguien suspendido en el aire encima del tipo dando una fuerte patada sobre su rostro. Se trataba de mí, tenía el traje puesto pero no la máscara.

Ante la fuerza de la patada cayó al suelo rodando unos cuantos metros hasta detenerse en una pared cercana.

El otro rápidamente lanzó a Serena hacia un lado y desenfundó una pistola pequeña apuntandome de inmediato.

-¡¿Quién eres?!- Preguntó mientras me apuntaba con la pistola.

Sin decir nada me levanté del suelo ya que había caído de cuclillas mientras giraba en su dirección.

-Lamentarán haber puesto una mano sobre ella-

Ante mi respuesta disparó su arma dos veces con un intervalo de 2 segundos entre cada tiro.

Al escuchar el sonido de ambos disparos mis ojos despidieron un destello púrpura antes de dar un paso atrás moviendo mi hombro izquierdo dejando que la bala siga de largo, después de eso hice lo mismo con mi otro hombro evadiendo los dos disparos.

Serena: ¿Púrpura? -Preguntó para si misma mientras se levantaba del suelo-

-¡Bastardo!- Enfurecido siguió disparando su arma.

Esta vez los disparos dieron en mi pecho y abdomen uno a uno.

Pese a eso seguí caminando aguantando los impactos de los disparos hasta estar de frente a él.

Sin darle oportunidad a huir solte un golpe en la boca de su estómago, no sé que tan fuerte habrá sido ya que inmediatamente cayó arrodillado al suelo y luego quedó inconsciente.

Mientras me dirigía hacia Serena el destello de mis ojos desapareció dejandolos como antes.

Serena miró por detrás de mí y gritó -¡Cuidado!-

Al girar vi que el tipo al que había golpeado al inicio se había levantado y me estaba apuntando con la misma arma.

Tiró del gatillo disparando la última bala que quedaba en el cartucho.

Por instinto me hice a un lado dejando que la bala pase, olvidando que Serena se encontraba detrás de mí. Fue su alarido de dolor el que me hizo recordarlo.

Ella cayó de rodillas al suelo llevando su mano derecha hasta un poco más abajo de su hombro izquierdo cubriendo la herida.

La bala no la había impactado directamente pero pasó muy cerca de ella haciendo una herida.
Pese a que se estaba cubriendo con la mano igual la sangre se filtraba por sus dedos.

-¡Serena!- Giré hacia ella pero inmediatamente me detuvo gritando.

Serena: ¡No voltees!

Un escalofrío recorrió mi espalda; el tipo sostenía la navaja en sus manos y se había avalanzado sobre mí.

La advertencia de Serena me dio el tiempo suficiente para dar vuelta pero no para alejarme.

El tipo bajó la navaja con fuerza, pero antes de llegar a mí, detuve sus brazos con mi antebrazo izquierdo. Sin embargo, eso no evitó que una parte de la navaja terminara enterrada en mi pectoral izquierdo.

Debido al dolor perdí fuerza rápidamente, pero para evitar que la entierre más, sujete mi muñeca izquierda con mi mano derecha haciendo fuerza logrando mantenerlo a raya.

-Eres el supuesto encapuchado, ¿verdad?- Preguntó mientras daba un paso adelante obligandome a retroceder -Te asesinare primero, y luego me divertire con la chica- Decía con una retorcida sonrisa la cual estaba llena de sangre, pues mi patada habia logrado sacarle uno de los dientes de adelante.

Ojos De VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora