Dialogar con los puños

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Serena: ¿Crees que estarán bien?

-Si, lo estarán-

Hace unos minutos
Rick: ¿Se tienen que ir?

-Si.. tenemos cosas que hacer-

Fabian: Son bienvenidos cuando quieran, justiciero.

-No me llames asi.. no soy un justiciero. Los motivos por los que hago esto son muy diferentes- Haciéndole un ademán con la cabeza a Serena y Elías empezamos a caminar.

Rick: Los nuestros también, lo son.

En el presente
Nos habiamos ido cada quien a nuestra casa, claramente la furgoneta se quedó escondida allí pero nos llevamos los cristales, Serena se quedó con uno y yo me llevé el otro para investigarlo.

Al llegar a casa pude ver a Lucy sentada en el sofá que estaba a lado de la ventana. Respiré profundamente y avancé hasta la entrada.

Sin ni siquiera poder tocar la perilla la puerta se abrió de golpe con mi mejor amiga al otro lado.

Lucy: Si dices algo, te apuñalo -Sin decir más dio media vuelta comenzando a avanzar-

Estaba furiosa, podía notarlo solo con su forma de hablar.

Cerré la puerta a mis espaldas y la seguí en silencio, al parecer estaba cocinando así que mientras ella lo hacía yo me quedé arrimado en una pared mirándola.

Hubo un momento de silencio que me pareció una eternidad, ella ni siquiera me volteaba a ver.

-Lucy yo..- En el momento en el que escuchó mi voz clavó con fuerza el cuchillo en la tabla de picar, el pequeño chirrido ocasionó que me exaltara un poco.

Lucy: Austin esto no puede seguir así.

-Ah.. si me dejaras explicarte..-

Lucy: ¡¿Explicarme que?! -Giró inmediatamente clavando su mirada en mí- Se que sales todos los días, ya se que no vas al laboratorio. Investigué un poco y el sitio explotó. No sé lo que haces y se que me ocultas secretos. Somos mejores amigos, ¿no?

-Si..-

Lucy: Entonces no me ocultes cosas.. estoy aqui para ayudarte pero no me lo permites, no haces mas que alejarte y siempre veo que regresas magullado o raro.. ya no se que pensar, Austin. ¿Por qué no me dices lo que haces y ya?

-Yo.. no puedo hacerlo- Agache la mirada con un notable sentimiento de culpa.

Lucy: Bien, solo eso quería saber -Sin decir más dio vuelta nuevamente volviendo a cocinar-

No me quedé ahí, caminé hasta mi habitación encerrandome.

-¡Carajo!- Grité golpeando con fuerza una pared cercana. Al alejar mi mano pude ver que habían pequeños rastros de sangre en mis nudillos.
Aunque las pequeñas heridas se esfumaron tan pronto como aparecieron.

Recoste mi espalda sobre la pared y me dejé caer en el suelo sentado.

-¿Cómo se supone que te diría algo como esto?- Susurre mirando mis manos.

Al día siguiente.

-Voy a salir- Le dije a Lucy quien estaba mirando su celular.

Lucy: Ok. Yo saldré luego, digo por si no encuentras a nadie al volver -Respondió con un nivel de indiferencia que nunca antes escuché en ella-

Sin decir palabra salí de la casa con mi mochila en mi espalda.

Llevaba mi traje en mi mochila, había hecho otra máscara similar a la de antes ya que la perdí y también reparé algunos de mis gadgets.

Ojos De VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora