𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐥𝐨𝐯𝐞

6- vendido por...

*Me empezó a doler casi todo el puto cuerpo pero abrí los ojos de manera muy pesada, estaba en el piso tirado como un sacó de papas volteé a todos lados y vi a mis amigos ahí tirados de la misma manera que a mi, con dificultad mire a  Venezuela, este solo se tocaba en el cuello, después  Argentina se empezaba sentarse tomando su cabeza y por ultimo chile que maldecía y miraba en frente, me pare y miré en donde Chile miraba, me sorprendí bastante de ese lugar, detrás de ese cristal estaba una multitud de personas que incluso reconocí por ser personas con mayor poder económico, voltee y vi a muchos que estaban parados posando de una manera sensual, unos que se divertían de lo que hacían y otros rogando para que lo vinieran a buscarlos, tenía que admitir que era asqueroso por esas clases de personas que les gustaba esa vida de prostitutos, escuche la voz de ese chileno y solo lo mire*

—Esto es realmente malo, estamos en su festival—Rechina sus dientes con cólera, México juraba que su cuerpo le temblaba del miedo un poco pero eso no era impedimento de demostrar miedo, México observo al venezolano sereno sin perder la calma, como si estuviera seguro de que alguien le iba a ayudar, bajo su mirada viendo una marca en el brazo de Venezuela, juraba que esa marca una vez se la vio a su madre en su nuca; Argentina estaba sentado buscando a alguien de la multitud, México solo miraba cada parte del lugar era el colmo recordó lo que dijo ¿ayer? o tal vez hoy? Ni siquiera sabia que día era ni que tiempo pasó de que estaba aquí pero lo que recuerda es que vio esas luces y ser atacado por ese hombre de aspecto intimidante, México solo miro curioso a chileno

—Che, esto no es un festival es una jodida subasta para comprar un acompañante o para que nos mate y nos quiten cada órgano para meternos droga en su lugar, de solo pensarlo me rompe el orto cuando hablo de los Blondies—Tomo la mano del chileno lastimándolo, chile lo soltó evitando no ser lastimado, se levanto aun adolorido por su mano y le reclamó furioso al argentino dándole un golpe en su cabeza, ¿realmente eran así ellos?, se pregunto México un poco divertido, esos dos a pesar de estar en una situación de vida o muerte no paraban de sonreír; escucharon la voz de un hombre avisarle a los guardias que trajeran a mas personas, pudieron ver como los adolescentes trataban de huir gritando por ayuda, otros solo caminaron a su voluntad propia para ir con sus compradores, tal vez ellos eran astutos para no ser asesinados

Venezuela estaba aun en silencio mirando en frente esperando a que los hombres lo tomaran, el rebasa por dos años  a Chile y Argentina, así que lo volvía el mayor de los tres siendo el primero que México que le lleva por un año, todas las personas entraron posando una y otra vez y otras asustadas solo se quedaban como estatuas. Antes de que entraran los cuatro latinos son sujetados con fuerza por unos de los guardias, fueron sorprendidos y le pusieron nuevamente esas estorbosas cadenas pero esta vez México tenia cadenas en las manos para no golpear y una en su espalda que sujetaba a su cuello pero no se había percatado que tenía una marca de un signo de 4J en su cadera eso lo pusieron cuando estaba ¿inconsciente?, igual sus amigos tenían cadenas pero no tantas como el tricolor de emblema de águila, entraron los latinos, pero el ultimo en entrar fue México que lo habían en pujado con fuerza por los guardias.

Unos minutos después

Se encontraba caminando en esos pasillos, estaba irritado por ser interrumpido por esos periodistas y fotógrafos que aclamaban su nombre, el vino solo para ver porqué diablos habían puesto esa luz tan curiosa que llamo la atención de todos, pero las personas se emocionaron por lo guapo que era en sus treinta y cuatro años ya que era un lujo que se veía muy bien y de que además se cuida su cara, figura y cabello largo. Caminaba tranquilamente logrando que su gran cabellera negra como el ébano se moviera de cada lado siendo muy atrayente por quien lo miraba por detrás; entró en esa gran sala oscura siendo muy poco que se alumbrara en el lugar  gracias por esa luz color rosado de los cristales por donde se veían los mestizos posando, este tomo su lugar cruzando su pierda con la otra para poder estar mas cómodo, una nueva presencia apareció en un lado del eslavo, sin importar quien era, el asiático de color carmesí  con estrellas doradas tomo asiento alado de su compañero