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GYDA

     -¡Hey Ivar, Bjorn nos busca!- fue el grito que te despertó y para cuando obtuviste conciencia de ti misma diste cuenta de que te encontrabas recostada al lado de un joven con tu cabeza en su brazo y siendo fuertemente abrazada. Trataste de moverte pero él seguía aferrado a ti, tan profundamente dormido que dudabas lo hiciera seguido. -¡Ivar!- Oiste pasos en el cuarto y alzaste como pudiste tu cabeza para con el brazo libre señalar el cuerpo que te tenía prisionera, hubo dos risas diferentes y luego el golpe de un cojín en el cuerpo masculino.

     -Ivar- murmuraste picando sus costillas con tu mano al tiempo de ver a uno de los hermanos dispuesto a lanzar otra almohada- Despierta- le hablaste más fuerte al verlo removerse, poco después le cayó la almohada, lanzada con más fuerza que lo anterior, en la cabeza y su bufido fue evidente. 

     -¡Mhhhh! ¿¡Qué les pasa!?- gruño con fuerza poniéndose de espaldas y tallandose la cara para despertarse; te levantaste con una sonrisa ladina y tomaste tu "vestimenta" para anudarla a tu cintura y el collar de tu cuello para posteriormente dejarla caer en tu espalda, todo dándoles la espalda a los jóvenes que en algún momento habían hecho silencio. 

      -¿Pasa algo?- Preguntaste al voltear a verlos. Los dos hermanos que habían entrado se miraron entre sí y tras una leve sonrisa y un encogimiento de hombros lo negaron, Ivar seguía en su posición más  serio que antes y sin apartar su mirada de ti. Tan serio, enojado e incluso parecía algo sorprendido, su expresión cambió de pronto al chocar con tus ojos, siendo ahora cubierta por algo de congoja.- ¿Y a ti qué te pasa?- desviaste tu mirada y caminaste a sus hermanos- ¿Acaso quieres más, y ustedes?- les preguntaste al estar frente a ellos.

     -Sabes, yo no me negaría a tu compañía- te guiño el ojo uno de ellos, mientras el otro te miraba de pies a cabeza con una sonrisa y acariciaba tu cabello.

     -Ustedes ¿Qué es lo que quieren, por algo me despertaron?- Les gritó Ivar distrayendo su atención y permitiéndote salir del lugar, dejándolos hablando solos. 

     Poco tiempo pasó cuando otro Vikingo entró, más alto que los chicos en la habitación de al lado, quienes por cierto salieron casi a la par.

     -Bjorn ¡Hermano!- gritaron en forma de saludo-

     -Ubbe, Hvitzerk ¿Desde cuando están aqui?¿Ivar donde...?- No terminó la pregunta al ver al "Deshuezado" salir del mismo lugar que sus hermano.- ¿Han estado aquí todo este tiempo? Se perdieron el festín de anoche.- Les sonrio levemente, cuando de otro de los cuartos salieron más chicas.

     -Hermano lo sentimos pero estuvimos muy bien acompañados anoche. Incluso se podría decir que tuvimos nuestro propio festín aqui.- Respondió Ubbe al señalar con la barbilla a las chicas, su hermano sonrió.

     -Se podría decir incluso, que Ivar quedo satisfecho- añadio, brevemente, el siguiente de los hermanos, ignorando el gruñido del nombrado.- 

     - Es cierto- Ubbe corrió hasta tomar uno de los vasos del lugar y vaciar algo de vino en él- ¡Nuestro hermano se ha concertido en todo un hombre! ¡Brindemos por ello!- grito al alzar su trago.

     -¿Es cierto eso?- Cuestiono con una sonrisa Bjorn.

     -¡Claro hermano! ¡Yo mismo. lo vi con mis ojos!- Respondió Hvitserk- Él  ni cuenta se dio cuando me asomé a verlos, estaba tan perdido entre las caricias de esa bella mujer- Los tres hermanos rieron y brindaron cuando Bjorn atrajo a Ivar con un brazo  quién, por supuesto, no quitaba de su rostro la seriedad que lo caracteriza.

     -Que orgullo hermano- Le abrazo Bjorn- y que felicidad saber que eres capaz de disfrutar de una buena mujer.- Ivar dio una leve sonrisa de lado correspondiendo el abrazo.- Pero habrá otro momento para festejar, el tiempo apremia y debemos seguir con nuestro camino.- Tomó el brazo de otro de sus hermanos incitandolos a andar.

     -Esperen- los detuviste al estar apuntó de salir- ¡Bjorn "Ironside" espera, tengo algo que pedirles!- los cuatro hermanos detuvieron su andar pero la mirada que recaía en ti con más fuerza era la de Ivar- Les ruego que me lleven con ustedes. 

     -¿Que es lo que quieres?- Respondió el mayor de todos al escuchar tu petición- ¿Sabes qué es lo que pides?

     -Libertad. Bjorn Ragnarksson. Libertad para poder acompañarlos. Fui vendida como esclava cuando mate al asesino de mi padre. Me bautizaron en la fe Cristiana pero nunca he dejado de creer en nuestros verdaderos dioses.- Hablaste con rapidez cuando escuchaste que los llamaban sus compañeros- No hay cosa que quiera más que regresar a ser libre y poder luchar como la gran Laggerta para defender a nuestro pueblo y poder obtener gloria y riquezas.- Los hermanos se miraron entre sí pensando en tus palabras hasta que una mujer entre ellas se posó frente a ti.

     -No le hagan caso señores- se interpuso - Ella es solo una prostituta, una esclava como las otras; que no los engatuse con su sucia lengua- y con la vara que llevaba en sus manos azotó tu espalda; al momento Ivar dio un par de pasos hacia ti, pero fue detenido por el brazo de Bjorn- Estamos tan agradecidos con ustedes, no podriamos pedirles nada  más.

     -Solo tus amos podrían darte la libertad- Mención Bjorn dando un paso hacia ustedes- ¡Nosotros! Los paganos,- miro a la mujer a quien le colgaba un crucifijo de la mano- atacamos esta ciudad- centro su mirada en ti- y sólo nosotros, verdaderos guerreros, verdaderos Nórdicos, nos iremos de aquí- termino por decir e inclinó levemente su cabeza hacia ti antes de girarse.

     Tú sostuviste su mirada hasta que con el giro la desvió, entendiste en sus palabras y en su mirada lo que había querido decir; era una prueba, probaba tu valía como vikingo a partir del asesinato de tu dueña, una cristiana que se beneficiaba de vender el cuerpo de sus esclavas y viendo las posibilidades no tenías nada que perder. 

     -Entiendo- Susurraste para ti y diste la media vuelta enfrentando a tu dueña, quien no pudo hacer nada cuando tomaste su cabeza entre tus manos y la giraste bruscamente para tronar su cuello. Cayó haciendo un ruido sordo y al sentir quitarte un peso de encima volteaste nuevamente a ver a los jóvenes en la entrada, solo Bjorn se encontraba en la puerta, recargado viendo el espectáculo, los tres más jóvenes seguían en el mismo lugar, todos luciendo una sonrisa.

     -¡Ahora todas son libres!- grito Bjorn para hacerse escuchar- ¡Nosotros- los señaló- marcharemos al sur, a saquear. Será un camino peligroso. Algunas tal vez mueran, pero si se atreven a venir las aceptaremos!- dio por finalizado su anuncio con un golpe en la madera y por fin salió.

     Corriste a las pieles y enrollaste una a tu cintura y otra a tu torso y del cuerpo sin vida tomaste el calzado y corriste a la salida notando que serias la única que se iría. Bjorn, Ubbe y Hvitserk habían salido, por su parte Ivar te detuvo en su mismo lugar.

     -¿En verdad vendrás con nosotros?- preguntó mientras salían.

     -¡He, tu!- Los interrumpió Hvitserk- bien hecho- Apretó tu hombro, al igual que Ubbe quien se acercó a ustedes también. 

     -¿Serás nuestra nueva "compañera"?- Ubbe enfatizó la última palabra guiñandote un ojo y tu reiste tapando tu boca con una mano.

     -Jajajajaja, ahora soy una mujer libre Ubbe- negaste con tu cabeza -pero, ¿Quién puede negarse a una buena ronda de sexo?- respondiste ahora siendo tu quien le guiñara un ojo -y tú- señalaste a Ivar quién iba a tu otro lado -Espero que ahora puedas pagarme "Deshuezado"- Sonreiste  con burla al final y el hizo lo mismo, agachando levemente su cabeza.

     -¿Cómo habria de pagarte?, si no conozco el nombre de a quién le debo- Respondió Ivar y te tomo de la mano, deteniendo tu andar. -¿Cómo te llamas?

     -Cuando fui vendida a los cristianos me bautizaron como Amadeis,- Ellos rieron- mi nombre, el que mis padres me pusieron y que porte hasta este momento, es Gyda- ellos parecieron detener la diversión ante ti para voltear a mirar a Bjorn, que los escuchaba no muy lejos y cuando volteaste a verlo buscando una explicación sólo sus ojos acuosos te miraron y luego prosiguió su camino, al igual que ustedes. 

PROSTITUTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora