Capítulo 32: La Curación Comienza

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Finalmente, la Guardia del León ha llegado a su destino, El Árbol de la Vida, y mientras caminan siguiendo a Rani y a su Equipo, observan el entorno, hasta que todos se fijan en un gran árbol, al cuál se dirigen al parecer.

-¡Poa! El Árbol de la Vida es gigantesco-exclamó Besthe asombrado.

-Sí, lo es-aclaró Rani, para luego adentrarse en el gigantesco árbol- ahora síganme.

Kion y los demás sólo obedecieron, y se adentraron en el árbol, sorprendiéndose por el interior tan grande y con vegetación dentro.

Luego de avanzar un rato, llegan hasta una roca, en la que yace una leona, al parecer de avanzada edad.

-Abuela, cómo lo pediste, he traído a Kion y a la Guardia del León-habló Rani, aunque tenía un leve tono de desconfianza- Guardia del León, ella es la reina Janna, guardiana del Árbol de la Vida.

-Sean bienvenidos-habló la reina Janna, mientras dedicaba una sonrisa a los invitados.

-Gracias, Majestad-habló Kion, mientras que junto a los demás hacían una reverencia- mi amigo Ono y yo hemos venido para curarnos.

-Acérquense, Kion y Ono-habló la reina, mientras los mencionados obedecieron la orden- tienen la marca de la Guardia, entonces son de las Praderas.

-Eh...sí-aclaró Kion.

-Así es-Ono también respondió.

-Así que, el Rugido ha regresado-habló la reina.

-¿Usted sabe del Rugido?-preguntó Kion, levemente sorprendido.

-Pues claro Kion, supongo que Rafiki los ha enviado-dijo la reina.

-Sí, Ono se dañó la vista, y, con mi cicatriz, no soy capaz de controlar el Rugido-Kion habló de los problemas de cada uno.

-Eso me han dicho, ¡Nirmala!- la reina llamó a la leona de ojos azules, quien se acercó y examinaba a Kion y a Ono- Nirmala es una valiente guerrera, pero también una dulce curandera.

Una vez terminó de examinar al león y a la garceta, la leona se acerca a la reina y le susurra al oído, para que luego la reina hable.

-Ono, curar tu vista será simple, pero el remedio llevará algunos días en prepararse-dijo la reina.

-Gracias Majestad-Ono agradeció, mientras se alegraba por la información.

-Kion, tu padecimiento, es más complicado, es más que una cicatriz, tu curación tomará tiempo, y paciencia-aclaró la reina.

-Pues, si no es molestia, quisiera empezar ya-habló el león, mientras trataba de ocultar su impaciencia.

-Estoy segura de eso- respondió la reina-Nirmala.

-Empezaremos hoy-dijo la mencionada, para que Kion agradezca el hecho-por aquí Kion.

Una vez que Nirmala se fue con Kion, la reina le pidió a Rani que les muestre el lugar a Fuli y a los demás, debido a que por su edad, ella no podía ir, además, ordenó a Surak y a Baliyo que sigan patrullando el lugar, pero la reina hace que Makini se quede, recordándole cuándo los padres de la mandril la trajeron a conocer a Rafiki.

La reina Janna le ofreció a Makini continuar su entrenamiento, pues Rafiki ya la había estado encaminando en convertirse en Mzuji Real.

Con Kion

Nirmala ha llevado a Kion hacia la orilla de un río, llamado Dirisha, también conocido como "El Río de la Paciencia".

-Y, aquí, ¿es dónde curarás mi cicatriz?, ¿así controlaré el Rugido?-preguntó Kion.

TLG: El Despertar del Ultra InstintoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora