24.

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— ¿Otra vez? — dijo Jimin formando un puchero.

— Lo siento Jiminie — contestaba Jin pero realmente no lo sentía, no aún — Nam me invitó a comer... Mira, hagamos algo, si quieres puedo venir por ti cada que termines tus ensayos y así no regresas solo, ¿te parece?

— Hmm... bueno — bajó la mirada — entonces nos vemos en un rato — diviértete —.

Jin lo abrazó y pronto cada uno tomó su camino. A decir verdad SeokJin se sentía culpable pero a lo mismo había decidido dejar que Jungkook se acercara a él, era su turno de enamorarse, el mayor estaba cien porciento seguro que Kook encontraría la salida a su laberinto si se tomaba el tiempo y la paciencia de conocer al peli rubio.

Por otro lado del escenario había un castaño corriendo a gran velocidad por dos simple razones.
Una. Quería ver bailar de nuevo a Jimin que claro, jamás lo admitiría en voz alta.
Dos. No deseaba en absoluto que se quedara solo mientras estaba en ese lugar y le pasara o de la última vez.

Iba tarde pues estaba entregando los papeles de permiso a su equipo así que salió después de hacer su trabajo.
Saltó la barda y sigilosamente entró por la puerta de madera.

I swear I'll love you in a different way...

La música comenzaba inundar todo el salón y Jungkook trató de caminar despacio por el estrecho pasillo.
Se hincó y observo con demasiado cuidado; su corazón respondió de la misma forma que la primera vez, era increíble, no solo ver el cómo Jimin vestía, con pants holgados y camisas ajustadas a su abdomen plano sino la forma en la que se sincronizaba con la melodía.

Parecía que él mismo controlaba cada palabra.

Llevó su mano al pecho sintiendo cada latido, ¿qué era Jimin y por qué entró tan deprisa en aquel lugar que se sentía cálido?

El peli rubio seguía su rutina y Jungkook se recargó en una pared mientras dormitaba, había hecho varias cosas en su semana que estaba cansado, no dejó que ni un solo movimiento de Jimin se borrara de su cabeza, él era hermoso.

Joder.

— ¿Jungkook? — escuchó la voz de Park y abrió rápidamente los ojos — ¡Oh por Dios, si eres Jungkook! — decía preocupado acercándose.

El castaño se incorporó sin saber que contestar.

— ¿Qué haces aquí? — continuó Jimin. En segundos todo se detuvo.

— Yo... — dijo mordiéndose el labio inferior — vi que venías hacia acá solo y pues me enteré de lo que te hicieron la última vez — puso de pretexto — así que me dio algo de pena por ti —.

A Jimin se le formó una mueca y su ceño se arrugó. Ni siquiera sabía como quería tanto a Jeon si él lo trataba de esa manera.

— Vete, no podías entrar aquí desde un principio — soltó el peli rubio apagando todo y recogiendo de prisa sus cosas.

— ¿Acaso esto es tu propiedad? — preguntó Jungkook alzando una ceja.

— No te importa —.

— Hmm, deberías agradecer que al menos vine — cierra la boca Jeon, decía su voz interna.

— Pues gracias — Jimin se colgó su bolso y después de abrigarse salió del lugar seguido por el castaño.

— No entiendo por qué te molestas  o por qué actúas de esa manera cuando antes no te despegabas de mi espalda — dijo Jungkook con algo de irritación. Eso cabreó  a Jimin más de lo que pudiera uno pensar — estuve aquí y te vi bailar...

— Exactamente — interrumpió el peli rubio — no debiste verme, esto no es algo que supieras de mi, porque al menos algo de mi ser no estaba dedicado a ti y disculpa si ya no estoy tras tu espalda — dijo enojado — eh estado ocupado recuperando mi dignidad —.

Jungkook bufó, iban a saltar la barda y en un intento de ayudar a impulsar al pequeño este lo pateó haciendo que perdiera el equilibrio.

Pero Jeon no iba a ser el único en caer de bruces, eso si que no, tomó los tobillos de Jimin  y lo jaló. —¡Suéltame tarado! — chilló Jimin — ¡ah! — y cayó al suelo.

Ambos se encontraban con el trasero lleno de polvo.

— Escucha — Jungkook se puso a horcajadas en Jimin sin tocarlo, puso sus manos en los hombros del peli rubio y lo miró fijamente — solo lo diré una vez. — Jimin se cohibió, él no podía creer todo lo que estaba sucediendo, así que solo asintió con la cabeza — déjame entrar a tu mundo, déjame saber el por qué llame tu atención y el por qué tu has llamado la mía.

Hubo un silencio.

Uno donde a Jimin se le aguaron los ojos, quería pellizcarse, ¿estaba sucediendo en verdad?
Jeon desvió su mirada a los abultados labios del pequeño y cuando este lo notó sintió un cosquilleo extraño.

— T-Tú...¿hablas enserio? — soltó sin perder de vista a mirada de Jungkook.

— Solo responde si o no — Jeon se quitó de su posición y le ofreció una mano a Jimin para levantarse.

Dentro de la cabecita de Jimin pasaron millones de ideas en segundos, ¿y si era una broma?, ¿y si estaba soñando?, tal vez era una puesta entre su equipo por eso ahora la mayoría le hablaba.

¿Cuántas veces más el peli rubio iba a decidir caer por su Jungkook?

Un billón y un veces más, dijo su corazón.

Jimin tomó la mano de Jungkook y se levantó.



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Ufaass me re emocioné.
Ya estos dos están un poco sincronizados.

¿Quieren un flashback de por qué Jin dejó
ir a JK con Jimin? o nel y así le sigo a la historia.

Amikxs no se me deseperen
esta historia va lenta pero segura,
lxs amo un montón.

Pt. 2/2
M. 2/3 

¡𝗖𝗼𝗿𝗿𝗲, 𝗝𝗲𝗼𝗻! º 𝗞𝗼𝗼𝗸𝗠𝗶𝗻Where stories live. Discover now