¡𝗖𝗼𝗿𝗿𝗲, 𝗝𝗲𝗼𝗻! º 𝗞𝗼𝗼𝗸𝗠𝗶𝗻

13.

Al final de la clase el peli rubio tenía que recoger los balones, no eran tantos, unos doce más o menos regados por todas las gradas.

Caminando cabizbajo y con ganas de ahorcar a quién se le acercara subió hasta la última fila de asientos donde estaba el último por recoger.

¡Por fin!, pensó.

Cuando volvió abajo un castaño, uno muy particular para Jimin entró al lugar, este lo miró con recelo.

— Vaya, terminaste rápido — dijo Jeon ofreciendo una botella de agua pero Jimin se alejó con la maleta llena de balones — es para ti...

El peli rubio quiso contestar tosco, quiso ser como siempre pero simplemente su corazón era sensible a la presencia del más alto.

— No tengo sed, muchas gracias Jeon — dijo sin doblegarse tanto.

Al menos no fue grosero.

— Esta bien, si necesitas hidratarte la dejaré aquí,— dijo — deberías aprovechar por lo menos el tiempo que sobra del almuerzo para comer algo también — dicho esto salió.

°•°

— Tranquilo Jin no es tu culpa — hablaba el peli azulado — aparte Jimin ni siquiera se ve afectado —.

— No, porque él así es aunque a veces se le salga su mal carácter — lloriqueo el mayor — Jiminie siempre va a decir que todo está bien —.

— ¿De qué hablan? — Jungkook llegó a sentarse con ambos chicos quiénes quedaron en silencio.

— De nada en especial — contestó Jin — creo que me iré ahora — sorbio su nariz.

— No estés así Hyung — habló Taehyung.

— Voy a buscarlo para pedirle disculpas — y con eso finalizó su conversación.

Los dos amigos empezaron a comer y Jungkook no podía hacer a un lado todos sus pensamientos, menos después de ver así a su mayor.

— ¿No piensas contarme nada Tae? — le dijo a su mejor amigo mientras éste masticaba dulcemente su manzana.

— Creí que no lo preguntarías — respondió con una sonrisa cuadrada — primero promete que no le dirás a nadie...

— Lo prometo — contestó sin dudar, ¿a quién diablos le diría?

— Por la garrita — Taehyung alzó su dedo meñique para enredarlo con el de Jungkook.

El castaño giró los ojos y también levantó su dedo, prometiéndole por la garrita porque solo así todo es más seguro.

— Bien — continúo Kim — pues parece ser que ayer en la tarde Jin no pudo acompañar a Jimin, sí, a tu dolor de culo — Jungkook hizo una mueca pues no le gustó para nada que ahora Taehyung se refiriera de esa manera al peli rubio — bueno, bueno, Jiminie~... — jugó — el punto es que como siempre van a cierto lugar, no me dijo a qué, la cosa es que cuatro chicos persiguieron a Jimin, al parecer estaban drogados y nada, Park se pudo esconder entre un basurero pero dice Jin Hyung que estaba demasiado asustado y aún así le contó a su mamá que todo estaba bien, que solo había sido un momento —.

Jungkook palideció, al menos ahora sabía porque el peli rubio lloraba afuera de su casa, también se daba cuenta del porqué le dijo aquellas cosas.

Jeon se sentía muy imbécil.

— ¿Y qué más? — indagó el castaño.

— SeokJin se siente fatal — dijo — y quiere pedirle disculpas pues aún no habla con él, se enteró de todo porque la Señora Park le habló un poco alterada, ya sabes, mamás —.

— Mamás — coincidió Jungkook con sus pensamientos divagando.

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Holaaa.
Bueno, para empezar
buenas tardes jaja.
Quería que supieran que hasta
ahora les he estado tratando
de narrar día tras día,
pero yo creo que si
es algo necesario no aburrirlos
mucho menos hacerlxs esperar tanto.
Así que haré está historia como las
que he escrito.

Gracias por leer, de verdad al principio
dude un poco en seguirlo porque
bueno, no pensé que les llamaría
la atención.

Pero es Kookmin, ¿quién no ama el Kookmin?💛💙
En fin, espero que sigan aquí hasta el
final

Lxs amo muchísimo ❄