Capítulo 9

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(Maratón 1/3)

Taehyung se encontraba acostado boca abajo en su cama, mientras tenía su mirada fija en una de las pantuflas tiradas en el suelo de la habitación. Estaba sumido en sus pensamientos, desde hace un par de minutos que el chico de mejillas regordetas salió de casa para encontrarse con sus amigos. Taehyung era una revolución dentro de su cabeza desde el día anterior.

Estaba tratando de ordenar sus pensamientos y sentimientos, claramente había fracasado en esa misión, por más que daba vueltas al asunto, siempre llegaba a la misma conclusión. Estaba perdidamente enamorado de Jimin.

¿Era eso posible? Solo habían pasado como dos semanas desde que conoció al mayor, ¿Era posible enamorarse en tan poco tiempo? Miles de preguntas no dejaban de rondar por su cabeza, todas acerca del rubio.

Sólo sabía con certeza que estar alado de Jimin lo hacía sentir bien, quería verlo sonreír desde aquel día en la oficina del mayor cuando fue ahi para agradecer la acción de éste, quería entralazar sus manos para volver a sentir esa calidez que solo había podido sentir dos veces, quería dormir a su lado y abrazarlo, quería tocar sus blancas y regordetas mejillas, quería poder besar esos labios gruesos y vulminosos que lo invitaban a moderlos y lamerlos para saciar su deseo, queria recorrer con sus manos y labios cada parte del pequeño y tonificado cuerpo del mayor, queria escuchar al mayor decir su nombre, queria que gimiera su nombre mientras hacían mil maravillas en la cama, pero también quería poder besar sus mejillas mientras lo abrazaba, quería ver una película a su lado mientras lo mimaba, quería salir a pasear estando tomados de las manos, quería todo con Jimin.

Pero, una parte de él quería borrar esos pensamientos, no podía enamorarse de un hombre, no podía enamorarse otra vez, no podía, ya no. No podía... Pero realmente lo deseaba.

Cerró los ojos mientras suspiraba con pesadez, estaba realmente condenado.

Por su parte un sonriente Jimin ingresaba a una cafetería, ubicando a sus dos amigos en una de las mesas a esquinas del local, camino hasta llegar a posicionarse alado de ellos, quienes al verlo, dejaron su platica y se pararon de sus asientos para abrazarlo con mucha efusividad.

—Hyungs...... Duele.—Dijo levemente al sentir pinchazos en sus costados

—Lo sentimos, ChimChim.—Menciono el mayor de todos para separarse de golpe de él.— Es que, estábamos realmente preocupados por ti.

—Si, tienes muchas que contarnos, pequeño.—dijo Hoseok mientras tomaba asiento junto a sus dos amigos.

—¿Qué cosas?—Preguntó el rubio con confusión a él comentario de Hoseok.

—Ya sabemos que estas con nuestro CEO.

Los ojos del menor de los tres se abrieron de par en par al escuchar la respuesta de Jin, el no les había dicho nada y dudaba que Taehyung les hubiera dicho, ya que éste no hablaba con nadie más que con Yoongi en la compañía. Y todo ese embrollo en el que estaba con su CEO le hacía cohibirse.

—Les diré todo, pero no juzguen nada.—Suspiro con resignación, después de todo confiaba en Seokjin y en Hoseok, apesar del poco tiempo de conocerlos, les había agarrado demasiada confianza, eran los primeros amigos sinceros que tenía aparte de un chico que conoció en secundaria, pero ya no lo recordaba muy bien.

—¿Como si pudiéramos hacer eso?—La indignación en la voz Hoseok fue notoria.— No juzgaremos nunca, Jimin. Eso no sería ser buenos amigos, aparte los tres tenemos muchas cosas con las cuáles ponernos al corriente y confiamos en que no juzgaremos.

—Hoseok tiene razón, nunca nos juzgaremos, ChimChim.—El mayor tomo uno de los panes que habían de cortesía en la mesa y comio de el.—Somos amigos después de todo, ahora ordenemos y pongámonos al corriente.

Heal me [Vmin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora