Destino Escrito

Capítulo 28

—!Estas bellisima!  —La voz cantaria de Pablo, el estilistame hace sonreir de medio lado.  —Al señor Jones le dara un ataque cuando te vea.  —Me quiña el ojo.  —Vere si la señora Jones se le ofrece algo.

—De acuerdo.  —Susurro sin apartar la mirada del enorme espejo de cuerpo completo.

Pablo tiene razon. A Steve le dara un ataque cuando me vea. He pasado casi dos horas en esta habitacion con el estilista maquillandome y vistiendome. Sin mencionar que antes me depilo las cejas y las piernas. Pero esas dos horas han valido toda la pena del mundo. En el reflejo se ve el reflejo de una mujer curvilinea de piel caramelo vestida, maquillada y peinada como una actris de Holywood en una premiacion de los Oscars.

Este precioso vestido Dior de color negro muy escotado de tela satin que llega hasta suelo con pequeños detalles de diamantes en el cinturon y en la division que deja ver mi muslo derecho al descubierto fue la mejor decision que he tomado para esta noche. Este vestido me queda como un guante ya que mis curvas ahora son mucho mas pronunciadas haciendo que el vestido me quede perfectamente ajustado y el escote...Pfff, esta brutal. Gracias a Dios que me han crecido los pechos y que ahora los tenga mucho firmes, grandes y definidos porque de lo contrario, jamas podria usar este vestido.

Alzo la mano y me toco unos de mis rizos que estan bellisimamente definidos y recogidos con delicados pasadores hacia un lado de mi cara. Segun Pablo, la mejor opcion para lucir el vestido era llevar todo mi pelo recogido hacia un lado para poder lucirlo de una manera muy elegante. Y en estos momentos que me veo el peinado con el impecable maquillaje que me aplico junto con el vestido, no se lo niego. Casi paresco otra mujer completamente distinta. No me reconosco en el reflejo de este espejo de cuerpo completo.

Unos leves y timidos golpecitos en la puerta me hacen girar hacia ella.

—Adelante.  —Grito lo suficientemente alto para que me escuchen del otro lado.

Unos segundos despues aparece Steve vestido impecablemente con un traje Armani color negro de tres piezas y en cuanto me ve, se queda completamente petrificado con la boca abierta mirandome de piez a cabeza con las pupilas totalmente dilatadas. Esta en estado de shock. Traga saliba y da un paso hacia mi.

—Puta madre.  —Exclama acomodandose el pene entre sus pantalones haciendo una exclamacion aguda.

Con una sonrisa maligna, doy un giro completo para mostrarle el pronunciado corte trasero que deja ver toda mi espalda y me detengo frente a el.

—¿Te gusta?  —Me hago la inocente toqueandome el pelo ajitando mis pestañas.

—¿Que si me gusta?  —Da un paso hacia mi y se pasa las manos por el pelo soltando una exclamacion.  —Joder Beth, mira como me tienes.  —Se señala la firme ereccion y yo suelto una carcajada.

—Oh, ya veo.  —Me acomodo el escote, me aserco a el y le arreglo la corbata que esta ligeramente torcida.

El me da un beso.

—Te ves increiblemente preciosa, cariño. —Me lanza una miradita.  —Esta noche seras el centro de atención.

Sonrio ampliamente ante su cumplido y le doy un pico en los labios.

—Me alegra que te guste.  —Dejo su corbata. —Creia que era demaciado.  —Me muerdo el labio inferior recordando la primera vez que vi el vestido. Tarde unos minutos en decidirme si comprarlo o hasta que al final me decidi y me lo traje a casa.

Steve frunce el ceño y niega con la cabeza.

—El vestido es perfecto.  —Me pellisca la mejilla y toma uno de mis rizos.  —Tu peinado y maquillaje tambien estan increibles. Debo reconocer que Pablo hizo un buen trabajo.