Mistery Of Love

•19•

Había mucho ruido. Si odiaba algo era el ruido. Pero tenía que distraerse con algo, sólo así mitigaría el dolor de la ausencia de Tom en su vida.

Pidió otro trago. Ir a bares era aburrido sin su novio.

Una chica se acercó. Jake creyó que se acercaba a él, pero en realidad era a la barra. Después de pedir algo de tomar casi cae en él.

–Cuidado, puedes lastimarte

–Creo que bebí demasiado –soltó una risa – Perdón por casi aplastarte

–Tranquila, a todos nos ocurre. Deberías ir a casa – contestó amable

–Sí, debería. Desde hace mucho que mis amigos se fueron – comenzó a quitar el cabello de su rostro, castaño como el de Tom.

En ese momento Jake se sintió mal, en todos lados estaba Tom

–Si quieres te puedo llevar, mi auto está afuera – se ofreció por simple amabilidad

–Gracias, pero tengo novio y le soy fiel

–¿Qué? No, no me mal entiendas, yo estoy de duelo por mi ex.

–Llevame a casa mientras me cuentas ¿si?
*

–¿En serio?– preguntó el otro chico mientras abrazaba a su novia

–Si entonces tuve que buscarlo en su trabajo, por que nadie me quería decir en donde estaba – tomó otro sorbo

Resulta que terminó haciendo muy buenas migas con la chica que llevo a casa y su novio. Eran realmente amables y comprensivos.

–Después me enteré que está esperando un hijo mío. Bueno, antes golpee a su amigo o no sé que sea de él...

–¿Y huiste? ¡Pero está esperando un hijo tuyo! –exclamó la chica

–Lo sé, pero ya he perdido a mi esposo y no quiero que él también se vaya de mi vida

–No siempre va a pasar lo mismo. ¿No crees que ese niño es una señal? Tal vez tengan que estar juntos

–Pero

–Pero nada hombre. Que no te importe lo que digan tus padres o los de él. Ambos son mayores de edad. Él también tiene que tener eso en mente.

Le sonrió triste y al mirar la hora se dio cuenta que debía irse. Había contratado una niñera y si no quería que se fuera tenía que ir rápido.

Una vez que se despidió le llamó a un taxi, no estaba en condiciones de manejar. Encargó su auto con los chicos y se fue.

*

Unos días después de que Tom se enterara de la "huida" de Gyllenhaal decidió salir. Había tenido que ir a su trabajo, fingir que estaba bien y quería Jake era asunto del pasado. Pero no lo era.

Cada vez se veía más mal, y sin embargo los análisis decían que se encontraba bien.

Tuvo varias discusiones con su amiga, por el simple hecho de no querer hablar de Jake.

Él se había ido ¿no? Y la morena simplemente le decía que la culpa era de él. No lo aceptaba, no quería aceptarlo. Era necio y orgulloso; nunca se retractaba de algo.

Algunas veces se daba cuenta de que había hecho algo mal, pero encontraba algo peor en la persona que lo había dañado.

Estaba a punto de renunciar a ese trabajo, tal vez encontraría otro lugar donde no se entrometerían en su vida.

Pasó cerca de la heladería, así que compró una nieve de limón que tanto disfrutaba.

Caminó por algunos locales más y se dio valor para entrar. Se quedó embobado con unos zapatos pequeños hechos de mezclilla.