Mistery Of Love

•24•

Sentía la temperatura fría de los asientos del auto. La ansiedad carcomía su estómago sensible.

Sólo quería ver a Paddy, sólo eso.

–¿Estás bien?– preguntó Jake al ver que sus labios estaban pálidos

–Sólo quiero hacerlo y ya, me da pánico pero, sé que lo tomará de lo mejor. – hizo fricción con las manos en busca de calor.

El día en sí estaba frío, pero con sus ansias y el cuero de los asientos hacían que pareciera estar en el congelador.

Llegaron más rápido de lo esperado a aquel lugar.

Gyllenhaal tomó sus manos, y besó ambas, en un intento de animarlo. Le dio un abrazo, para después besar su frente. Holland sonrió, y animado bajó a buscar a su hermano, quien le esperaba impaciente.

Al verlo se alegró. La noche anterior, sus padres habían hecho llorar a Tom. Le recordaron con empeño que había perdido al bebé, y que la culpa era de Jake. Salieron de ahí, totalmente afectado; entonces supo que tomó la desición correcta. Pero había un pequeño detalle: Paddy, el único que apoyaba aquella relación.

–¿Cómo te fue en la escuela?– preguntó el mayor, caminando hacia el auto

–Bien, solo que la clase de matemáticas no la entiendo – contestó alegre de que su hermano estuviese mejor

–Eso es algo normal –abrió la puerta del auto para que su hermano entrara.

–Hola bebés – saludó a los pequeños que se encontraban en las sillas –Hola Jake

Estuvieron unos minutos manejando, hasta encontrar la heladería de siempre. Los dos hermanos bajaron. El chico presentía que algo no muy bueno iba a surgir de los labios de su hermano mayor.

Tom esperó que llevaran sus helados y después de comer un poco comenzó a hablar.

–Paddy, entiendes que fue lo que pasó ¿no?– preguntó bajando la voz. El chico asintió – y ya te diste cuenta de como papá y mamá tratan a Jake – volvió a asentir– es casi lo mismo con su familia y estoy cansado. Cuando pasó lo de mi bebé – la voz se le entrecortó e hizo uns pausa

–Sólo dilo, te entenderé – el menor tomó la mano de su hermano intentando apoyarlo

–Jake y yo nos vamos de aquí. Sin avisos, sin despedidas. Bueno, sólo tu sabes – agachó la mirada, pues sabía que a su hermano le dolería

–Haganlo. Si son felices así, todo estará bien – sonrió con lagrimas en los ojos. Pasaría demasiado tiempo para que lo volviera a ver.

Esperaron a terminar su helado para irse. Solo lo dejarían en casa, para después desaparecer.

Al llegar a ese lugar que fue su hogar, Tom abrazó a su hermano, y el chico a de vez abrazó a Jake, a los cachorros y Tom.

Entró a su casa. Todo seguía normal. Nadie sentía culpa por Tom. Entendió aún más que eta necesario que se fuera. Estaría mucho mejor.

*

–¿Jeanne? Sí, ya vamos para allá – habló el ojiazul al teléfono – todo está arreglado – el castaño estaba comprando agua y algunas botanas en una gasolinera.

Tomó unas papas con queso, un refresco de cola y una botella de agua. Se sentía cansado del viaje.

Pero estaba tranquilo; al fin, todo estaba en manos de sus amigos.

Aunque le había dicho a Paddy que sólo él sabía, Fox, Jacob y Zendaya estaban enterados.

Fox se había quedado a cargo de su departamento. Jacob ayudaría a vender las cosas que dejó y Zendaya de todos sus pacientes, además de que había renunciado.