Easy (Camren)

Capítulo 31

Tres meses después...

Narra Lauren

—¿Saldrás hoy?—deje de picar las verduras para mirar hacia Camila.

—No, ¿por qué?—volví a lo mío y seguí picando las verduras para el comida que estaba haciendo.

—Iré con el obstetra—la mire de nuevo y me sonrió sin mostrar sus dientes— ¿quieres venir?—pregunto un poco insegura.

—Claro, me gustaría mucho—sonreí, pues estaba emocionada de ir con ella, cada mes se hacia la revisión y el mes pasado no pude asistir con ella porque tenía un trabajo de hacer— ¿ya lo saben tus fans?—le pregunté vaciando las verduras en el sartén.

—No, quería subir el ultrasonido que me darán hoy para así darles la noticia—asentí recargando me en la mesa de la cocina.

—Claro—empecé a jugar con mis manos nerviosa, quería hacerle la pregunta pero no podía.

—Serás la mamá Lauren—la mire de inmediato— diré que tú eres la madre biológica, ya es decisión tuya el decirles sobre tu condición—suspiré al escucharla, ella había leído mi mente.

—No es que no lo sepan ya sabes, todas las chicas con las que me he acostado lo saben y vaya que son muchas—sonreí juguetona y vi como ella levanta una ceja y se cruzaba de brazos, deje de sonreír y me puse seria— lo que quiero decir es que tal vez todas aquellas chicas ya lo hayan difundido—trate de arreglar el problema y ella solo asintió.

—Claro—camino hacia el sofá y tomo su bolso— pasas por mi a las tres, la cita es a las tres y media—se coloco el bolso y camino hacia la puerta, la seguí y se la abrí dejando que saliera— adiós.

—Adiós—me despedí de ella y suspiré cerrando la puerta para recargar me en ella— que idiota eres Lauren—me dije bajo y camine de nuevo hacia la cocina.

Narra Camila

Baje los escalones del edificio y mi celular empezó a sonar, lo saque de mi bolso y conteste la llamada.

—Hola guapa—sonreí al escuchar su voz.

—Es bueno escucharte, ¿cómo estás?—camine hacia mi camioneta y entre a ella, puse la llamada en alta voz y coloque el celular en el portavasos.

—Muy bien, me falta todavía algunos países por recorrer pero todo está bien—encendí la camioneta y salí a la autopista— ¿tu como estas? ¿cómo vas con el embarazo?

—Bien, en un rato tengo que ir con el obstetra para la revisión del mes—le expliqué sin dejar de ver la calle.

—Eso es bueno, ¿ya sabes que será?—sonreí ante su pregunta.

—No, pero espero saberlo esta tarde, estoy muy nerviosa—le dije bajo mordiendo mi labio.

—¿Por qué? ¿Que pasa?—se escucho su voz preocupado.

—Ya sabes, cosas de madre primeriza—me detuve en un semáforo y pase mi mano por mi cabello recargando me en la puerta de la camioneta.

—Si lo sé, como ya fui madre primeriza—dijo muy feliz y sonríe ante su broma— ¿que pasa Mila?—pregunto serio.

—Tengo miedo de no poder ser una gran madre, hasta tengo miedo del parto—avance de nuevo cuando semáforo cambio a verde.

—Es normal Mila, tú lo has dicho, eres primeriza, todo irá bien—me ánimo— tienes el apoyo de todos tus amigos, de mi, de tus padres, del padre de Lauren y sus hermanos y lo más importante, tienes el apoyo de ella—suspiré y una lágrima resbaló por mi mejilla, él tenía mucha razón, tenía el apoyo de Lauren, la tenía a ella.