Capítulo 22

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N/A: necesito que vayáis al capítulo anterior de nota/duda y leáis lo que puse por favor🙃 dicho esto, os dejo con el capítulo.

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Los pensamientos eran borrosos y la noción del tiempo no estaba presente cuando el alfa de ojos esmeralda se encontraba acariciando con dos de sus dedos el borde de mi húmeda entrada.

La habitación, a petición mía, se encontraba sumida en completa oscuridad, no quería ver aquellos ojos ni debía observar aquellos carnosos labios que sabía que no podría obtener, que no hubiese ni un ápice de luz hacía todo más fácil, no habría miradas significativas, no habría interpretaciones de ningún tipo, solo omega y alfa manteniendo juntos sus cuerpos por un tiempo. Nada más.

Mi rostro se encontraba escondido entre la almohada mientras que mis manos estaban a cada lado de mi cuerpo agarrando con fuerza el cobertor que cubría el colchón, Harry estaba torturándome, la yema de su dedo hacía pequeños círculos en mi entrada, sabía que su dedo goteaba a causa de mi lubricante natural, estaba tan absorto y concentrado en sus movimientos que no me di cuenta de que lo introdujo sin ningún aviso, un dedo haciéndose camino en mi interior.

Cerré con fuerza los ojos y en el momento en el que introdujo un segundo mi boca comenzó a soltar gemidos.

Harry, tras de mí, estaba haciendo un muy buen trabajo, pero no era suficiente, necesitaba algo más.

Como si me estuviese leyendo la mente, comencé a sentir algo húmedo y cálido en mi entrada junto a dos de sus dedos acariciando mi punto G.

Su lengua trazaba círculos, como previamente hizo su dedo índice, parecía estar tomando todo  mi lubricante para no desperdiciar ni una gota, era tan excitante que mi cuerpo tembló. Su saliva caliente por mi piel, sus carnosos labios acariciándome de vez en cuando.

Me puse de rodillas, incliné la espalda y saqué el culo para que Harry tuviese un mejor plano de lo que debía saborear, su gruñido no tardó en llegar. Algo bueno tenía que tener después de todo ¿no?

Cuando se apartó un poco, me eché hacia detrás para volver a sentirle, pero con su mano libre me frenó sujetándome de un lado de la cadera.

"Estate quieto fiera".

Gruñí en respuesta, había parado y no quería que eso ocurriese.

Rió bajo y continuó con su labor.

Antes de introducir un tercer dedo comenzó a abrir los dos anteriores en mi interior como si no le gustase la sensación de sentirse apretado por mí.

Su lengua se elevó hasta uno de mis cachetes y tras lamerlo, le dio un leve mordisco que lejos de dolerme, me resultó excitante.

Mi cuerpo cayó en el colchón ya que mis rodillas no podían seguir aguantando pero al parecer, Harry no estaba a gusto con ello, por lo que con su brazo libre me alzó por el estómago y volvió a colocarme donde antes, su mano acariciando mi abdomen con tanta calma que no parecía el mismo que me estaba follando con sus dedos con tanta fuerza.

Sus traviesos dedos no dudaron en acariciar mi pezón, todo mi cuerpo se erizó, mi respiración se hizo errática y mis pulsaciones se aceleraron. Joder.

"Mmmm" fue cuanto salió de mis labios justo antes de que diese un pequeño y rápido tirón de ellos.

"Tu cuerpo..." no dejé que acabase la frase, no era necesario, no lo quería.

"Dijimos que nada de hablar".

Silencio otra vez.

Escondí mi rostro en la almohada.

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