Instinto

Capítulo 34

HARRY:

Me acomodé el gemelo de la manga de la camisa y me coloqué la chaqueta con ayuda de Liam.

Me levanté el cabello que se había quedado bajo la suave tela y me lo agarré para hacer una coleta, sabía cuánto odiaba mi padre el pelo largo.

"Te ves increíble Harry" me alagó mi amigo mientras veía en el espejo el reflejo del morocho que rodaba los ojos hastiados.

"Alfa ni se te ocurra gruñir por hacerle un cumplido a mi amigo que resulta ser tu mejor amigo" le amenazó el omega.

Reí elevando un lado de la comisura del labio.

"No gruñí" se excusó.

"Pero ibas a hacerlo, lo sentía burbujear en tu garganta".

Zayn suspiró resignado.

"Me voy a fumar" anunció levantándose de mi cama. "Cuidadito con mi omega Styles" advirtió.

Rodé los ojos.

"Supéralo ya Zayn, son muchos años siendo mi amigo".

"Ya bueno, Louis también es tu amigo y tienes otras intenciones con él".

"¡Eh!" me quejé girándome para echarle cara "¡en mi defensa diré que yo no quiero que sea mi amigo!"

"Harry si no te vas ya no llegarás a tiempo" me recordó mi amigo.

Volví a mirarme en el espejo y respiré hondo. No creo recordar haberme puesto tan nervioso en mucho tiempo, pero ese era el efecto de mi padre, no dejaba de poner en tensión a las personas, era un hombre demasiado exigente y difícil de complacer.

"Ya verás cómo todo saldrá bien" me dijo antes de darme un abrazo.

(...)

Me bajé del taxi cuando éste paró en la entrada del magnífico hotel.

Había una larga y roja alfombra que adornaba y guiaba el camino hacia la sala de fiestas, fotógrafos a cada lado tratando de captar a las personas famosas y de la alta sociedad, queriendo hablar de sus elecciones de vestimenta y tratar de tener un buen titular del que poder pavonearse y hacerles ganar mucho dinero.

Cómo odiaba esto.

Respiré hondo antes de que nadie se percatase de mi presencia, era muy raro que yo, Harry Styles, hijo del más codiciado empresario de Reino Unido, Des Styles, asistiese a alguno de sus eventos.

Iba a dar el primer paso hacia la marea de flashes y gritos cuando alguien me tomó de la cadera y me hizo parar.

"Hola cariño" saludó antes de darme un beso en la mejilla.

"Buenas noches Margaret, estás..." le agarré la mano y la aparté para poder apreciarla. "Fantástica".

Me sonrió con sinceridad y alagó mi traje también.

"Hacía mucho que no nos veíamos..."

Asentí y pude ver cómo Dan se acercaba a nosotros con una gran sonrisa en el rostro, nada nervioso por ver a su mujer y amantes compartiendo una charla trascendental, pero yo sí me tensé porque hacía varios días que no sabía de él. Después del incidente que ocurrió en mi piso con Louis, no supe más del alfa.

"Verlo para creerlo... el alfa asistiendo a la fiesta de su padre..." se dirigió el alfa a mí.

"Será mejor que entremos" dije en un intento por evitarle.

Caminamos por la alfombra y mientras Margaret y Dan se paraban para ser fotografiados, yo decidí entrar con pasos acelerados a pesar de los llamados para que me pillasen en un primer plano. Me negaba a pertenecer a esto.