034: algo más

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Presente

Claudio

Estaba en mi respectivo dormitorio que compartía con Silverio y Ulises, me encontraba hurgando entre las pertenencias de Emilia, las cuales había colocado dentro de una caja. He estado haciendo esto durante los últimos días.. de alguna manera, esto me ayuda a sentirme un poco más cerca de ella para que del mismo modo, no la extrañe tanto cómo lo he hecho.. Me he sentido vacío, imprudente.. todo éste asunto me hace mal y me afecta demasiado.

Es cómo si de alguna manera, algo de mí se haya ido.. y mi yo del pasado ya no existe más. Es muy loco pensarlo de esa forma, pero así lo siento.. Es tipo cuándo dejas de respirar y todo lo que solías conocer, ya no esté más y quede todo cómo un vil recuerdo del pasado, otra versión de ti mismo que a lo largo del tiempo, irás olvidando.

Justo así me siento yo..., vacío. Nada tiene sentido ahora, ahora que todo ha llegado a sun fin, está tormenta ha terminado. No encuentro mi rumbo, el rumbo que me guiará a ver la realidad y poder aprender cómo vivir sin ella. No conozco una vida en la que ella no esté, no quiero decir que dependo de ella, pero de cierta forma creo que lo hago. Sin ella, no sé quién soy, ni a dónde voy, no sé absolutamente nada.

Quisiera desaparecer a otra galaxia..., a un universo, o una vida en donde ella esté, conmigo. Quisiera volver a tenerla junto a mí y poder decirle lo mucho que la quiero y cuán importante es para mí., poderle demostrar mi amor con hechos, y no solo con palabras. Quisiera tener otra oportunidad para decirle muchas cosas que jamás le dije, hacer cosas que jamás hice.. no aproveché el tiempo, me reprimo por eso.

Llevo más de una semana sin querer hacer nada, todo el tiempo me la he pasado aquí, encerrado en el dormitorio.. vagando por mis pensamientos y reprimiéndome a mi mismo. No he querido salir, ni hablar con nadie, solo quiero estar solo.. solo y hundido en éste hoyo. Total, nadie se preocupa por mí.

Todos me ven cómo un loco por querer hacer justicia por la persona a quién más quiero en éste mundo.. ¿Acaso eso un crimen? Tal vez sí, tomar acción por mi propia cuenta sería muy mal visto y es conocido cómo un delito, pero el querer averiguar y descubrir la verdad, ese no es un crimen. Es querer saber todo para poder ayudar a esa persona, aunque no esté más.. es querer hacer todo lo posible porqué se sepa la verdad y qué todos conozcan los motivos reales que la orillaron a tomar esa decisión.En mis ojos, no es malo, no lo es.

Había estado aquí sentado toda la mañana, cómo había dicho anteriormente, no he salido de aquí para nada, no tengo cara para hacerlo. Rebusco y rebusco..., nada, pero cómo si fuese una señal enviada por algo, mis ojos caen en una pequeña caja rojiza, esto no lo había visto antes. ¿Cómo es posible que no lo haya notado antes? La tomé entre mis manos y con el ceño fruncido, la abrí lentamente y me sorprendió bastante lo que había en su interior. Dentro de ésta caja habían algunas fotos, cartas y una cadena con la letra inicial de "M."

Qué extraño. — pensé

Cogí una de las fotos y sentí cómo mi corazón se hundía al instante en que la vi.. Eran Machu y Emilia, abrazadas.. mientras Machu le besaba la mejilla a Emi.. ¿Pero qué es esto? Volteé la foto y por detrás tenía algo escrito en tinta negra.

"Eres esa persona tan especial qué me hace sentir algo, que nunca antes había experimentado.. te quiero."

Leí esa última frase.. mi corazón había dado un vuelco, sentí mi estómago contraerse.. ¿Qué significa todo esto? Tomé otra foto y ésta fue la gota que derramó el vaso, en ésta pude divisar a Machu y a Emilia.. ¿besándose? ¿Qué? Pero.. ¿cómo y por qué? Arrojé dicha caja por algún lado de la habitación y me puse de pie. Empecé a arrojar todo lo que estaba en mi campo de visión.

Me hervía la sangre, estaba perdiendo el control.. no sé qué hacer. Por primera vez, después de casi una semana, salí de aquella habitación dando un portazo y caminé apresuradamente.. dejándome guiar por mis piernas, hasta el encuentro de Machu. Tenía que exigirle una explicación a todo esto, necesito una explicación. Llegué a donde estaba, la vi sentada en algún sillón que yacía en el playroom.. caminé en dirección suya y la tomé bruscamente del brazo, arrastrándola a un lugar más privado..

Me detuve en el patio trasero del instituto, ella tenía el ceño levemente fruncido y una cara de espanto.. Yo ignoré eso, no me compadecería de ella, no ahora que sé la verdad, una verdad que jamás pensé posible. En todo éste tiempo, yo he pensado que Machu y Emi no eran más que enemigas, ni siquiera eran amigas y ahora resulta que eran más que eso..., se entendían. Qe decepción, de verdad.

No vengo en busca de excusas, ni mucho menos de mentiras.. solo quiero la verdad y nada más que la verdad. Ella tenía la mirada fija en el suelo, la tomé del mentón y la obligué a verme a los ojos, ahora si, no tenía escapatoria.

Me crucé de brazos y levanté un poco la ceja, esa típica expresión que hacés cuándo descubrís algo o tenés alguna sospecha. Ella volvió a fruncir el ceño y desvió la mirada.

— Machu, quiero la verdad, no intentes huir porque no ganarás nada con hacerlo, lo sé todo.. solo quiero oírlo de tu boca. — solté, ella tragó grueso cómo si supiese de lo yo estaba hablando y si no lo sabe, ahora lo sabrá.

— No sé de qué me estás hablando, Claudio.. — dijo con firmeza.

Llevé mi mano hacia mi bolsillo y de ahí saqué la dichosa foto en dónde aparecían ellas dos besándose, le di un último vistazo antes de voltearla por completo y mostrársela. Ella engrandeció los ojos y pude divisar cómo su piel se tornaba pálida.

Bingo.

— Sí sabés que es esto, ¿no? Decime todo, ahora. — exigí.

Ahora no había ninguna escapatoria, la haría confesarme toda la verdad de una vez. Esto ha llegado a su fin.

Llegó el momento de hacer justicia de una vez por todas.

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