TODOS TIENEN SECRETOS

036: una historia diferente

Pasado

Emilia

Seguramente se estarán preguntando.. ¿Qué pasó entre Machu y tú? ¿Qué pasó después de que se confesaran lo que sentían? Pues, la verdad es que después de eso solo intercambiamos alguna que otra palabra.. y optamos por ir de a poco a poco.. y ver qué pasaba entre nosotras, si es que lo que sea que habría entre ambas funcionaría. A medida que fue pasando el tiempo, mis sentimientos hacia ella fueron aumentando y fortaleciendo. No pasaba un día en el que no pudiera dejar de pensar en ella, y que no deseara estar a su lado las veinticuatro horas del día, pero para todo hay un límite.

Decidimos mantener nuestra relación en discreción, no se lo contaríamos a nadie porque es evidente qué nadie entendería.. sería nuestro pequeño secreto, algo que sólo nosotras dos sabríamos y nadie más. Un amor sin obstáculos, sin capullos, sin nada que lo detenga y principalmente, sin barreras...

Una historia aparentemente diferente, pero pura. No es de esas historias de amor cliché en donde te enamoras de un compañero que conoces en tu mismo colegio, o cuándo te enamoras de tu amigo. Está es una historia distinta, única.

Odio, ese sentimiento profundo e intenso de repulsa hacia alguien, que te genera el deseo de producirle un daño o de que le ocurra alguna desgracia. Ese mismo sentimiento que nos ciega y nos impide ver la realidad, lo más obvio.

El amor, es el sentimiento más puro e inocente que te hace delirar y te provoca esas típicas mariposas en el estómago. También te puede generar mucho dolor y sufrimiento, siempre y cuándo sepas cuál momento sería el adecuado para poner un límite a tus expectativas en ese aspecto.

El odio y el amor, dos sentimientos totalmente diferentes y para nada compatibles, cuyas sensaciones que te generan son absolutamente distintas.. pueden hacer un choque y conectarse de alguna u otra forma para que tú en ese instante, quedes flechado por algo que parece ser imposible, pero real a su vez, cómo enamorarte de quién odias, el odio se convierte en el más puro amor.

Bueno, otro tema qué tal vez debería mencionar es el siguiente.. ¿Qué ha pasado con Claudio? Resulta que antes de qué Machu y yo nos confesáramos nuestros sentimientos, el vino a hablar conmigo y me pidió otra oportunidad. Aprovechó para darme una explicación de lo que había sucedido y cómo habían pasado las cosas, le creí. Al principio yo pensaba en pedirle que las cosas se quedaran así y que si quería, podríamos ser amigos, pero el me rogó hasta que me convenció.. terminé por darle otra oportunidad y pensaba que todo iría bien, obviamente sin saber lo que pasaría después.

Cuándo pasó lo de Machu, no supe qué hacer y me encontraba entre la espalda y la pared. Opté por contárselo a Machu y ella entendió, me dijo que sería una buena idea que siguiera con el. Obviamente no le agradaba mucho la idea, pero era por nuestro bien, para que no estuviéramos a riesgo de que nos descubrieran y para que no sospecharan nada.

Cómo cualquier otra pareja, teníamos nuestros encuentros y cosas de ese tipo.. lo único distinto era que todo lo hacíamos discretamente.. Cabe decir que hasta nos enviábamos cartas para comunicarnos cuándo no pudiéramos. A cuánto a nuestra reputación y el mundo exterior, ósea los alumnos que asistían al instituto, tuvimos que seguir cómo si nada hubiese ocurrido, actuando que nos odiábamos cómo lo hemos hecho desde un principio.

Esa parte no me gustaba, no me gustaba tener que ocultar lo que sentía, ni mucho menos tener que soportar cómo ella me decía de cosas, aunque todo eso fuera fingido y nada fuera cierto. Había mencionado algo parecido a esto una vez, máscaras, tener que fingir algo que realmente no somos y todo para proteger nuestra imagen. Llevo haciendo eso por mucho tiempo, así que la verdad no me molesta.

Machu y yo.. todo va bien.. Hemos tenido muchos momentos lindos juntas y muchos recuerdos realmente importantes y significativos.. cómo aquella vez cuándo me dijo, "te amo" por primera vez, cuándo nos entregamos completamente.

•••

Caminaba en dirección a mi dormitorio, al entrar cerré la puerta detrás de mí y proseguí a sentarme en el sillón que yacía dentro de la habitación. Cogí algún libro que estaba por ahí y empecé a leer, era algo que realmente me gustaba hacer y me ayudaba a distraerme. De pronto escuché un ruido proveniente del baño y el sonido de la puerta abriéndose. Fruncí el ceño y me puse de pie, es ahí cuándo vi a Machu saliendo del baño.

Ella aún no se había percatado de mi presencia, pero pude divisar cómo su cabello estaba mojado a causa del agua, supongo que se acababa de dar un baño. Su cuerpo era cubierto solo por una toalla, eso me hizo tragar grueso. Ella se giró y sus ojos se clavaron en los míos, me sonrió y comenzó a caminar hacia dónde yo estaba.

Lo único que podía hacer en ese momento era alejar mi vista de su cuerpo, no podía permitirme a mi misma verla de esa forma.

— ¿Y esa sorpresa que te encuentro por aquí, mi amor? — preguntó mientras resonaba mi cuello con sus brazos.

Apenas me había percatado de que me acababa de decir, "mi amor".. sentí una sensación diferente, una muy linda, hecho que me hizo sonreír involuntariamente, ella hizo lo mismo.

— No sé.. quise venir a descansar un poco, pero no sabía que te encontraría aquí.. — respondí, ella dejó un beso sobre mi cuello, otro en mi nariz y finalmente en mi mejilla.. Con cada tacto suyo, provoca que yo me sienta nerviosa y qué mi piel se erice a flor de piel.. pero no me quejo, me gusta lo que me provoca. — Si sigues haciendo eso, no te dejaré vestirte, eh.. — me burlé, ella soltó una risilla y de nuevo esa sonrisa que tanto la caracteriza.. Podría quedarme aquí toda la vida solo para ver su sonrisa, esa que me gusta mucho.

— Hmm.. — hizo un gesto cómo si estuviese pensando.. — ¿Sabes? Eso suena tentador.. — se rió.

Se acercó a mi y me acarició mi mejilla con su dedo pulgar, al mismo tiempo que enredaba sus dedos de su otra mano en mi cabello, acariciándolo a su vez. Después de unos minutos, acercó su rostro más al mío y antes de juntar sus labios con los míos, dijo algo que me tomó totalmente por sorpresa.

— Te amo, cholita.— y sin más, juntó sus labios con los míos en un beso desesperado, pero lindo y lleno de pasión.

Llevó sus manos hasta mi cuello, atrayéndome más an ella. El beso comenzó a intensificar y subir de tono, ya sabía lo que pasaría.

Ese día nos entregamos, nos amamos cómo nunca antes hemos hecho, juntamos no solo nuestros cuerpos, pero nuestras almas y nuestros corazones. Ella ha sido producto de mi mejor delirio y mi más grande historia de amor, que comenzó siendo odio del bueno. Jamás pensé que esto podría ser posible y que terminaríamos así, pero pasó y no me arrepiento de nada. Ella fue un gran apoyo y estaré eternamente agradecida con ella.

Lástima que todo tiene su fin y que nada es para siempre, cómo nuestras vidas.

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