Si quería lograr algo con ella tendría que ser caballero.
-¿Donde estamos?
-En una tienda.- Me miró confusa.- De peluches. Puedes armar el que quieras.
Estaba nervioso de que me rechazara.
-¿Enserio?
Ahí vamos.
-Amo los peluches. -Decia mientras daba pequeños saltitos.
Sus ojos estaban iluminados.
La primer estación era de escoger el modelo.
-Quiero... Uhm... ¡Ese!.- Dijo señalando un cartel con un delfín.
Me acerqué al escritorio y un chico como de mi edad nos miró.
Por miró me refiero a comer con la vista y a nos me refiero a ella.
No le quitaba la mirada de encima.
-Hola. Quería... Uhm... ¿Hola?
La seguía mirando.
Me volteé y ví que ella miraba hacia abajo.
-¿Es tu novia?.- Me susurró.
-Uhm... Si, claro. ¿No, cariño?.-Dije preguntándole a Lilli.
-Alejate pedófilo del bosque.-Genial.
-¿No es tu novio?
-¿Él? Iug. No.- Respondió ella haciendo una mueca.
-Creo que aún no tengo el gusto...-Le dijo él.
-Lilli... Lillian.
-Ian. Y... Lilli, ¿Tienes algo que hacer mañana en la noche?
-Depende quien lo pregunte.
Explotare.
¡ESO ES UNA FRASE DE COQUETEO!
-Lilli, la idea era que crearamos peluches mutantes, no que vinieras a coquetear.
-Tienes razón. Luego nos vemos.
Ian le hizo una seña de teléfono.
Quiero que me entiendan.
¿¡Quien se cree!?
No hice tanto para que otro termine llevándosela.
Es mi territorio.
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Este no es otro cliche
Fiksi Remaja"Dicen que cuando estas enamorado el tiempo de detiene... Y es cierto." Matt Daniels, un chico frío; con un pasado que no quiere recordar, es uno de los narradores de esta historia. Nos cuenta la historia de cómo conoció a Lucy, una chica alegre...
