Crónicas de un alma desgastada.
¿Alguna vez te miraste al espejo y te dio pena mirar tu reflejo?
Y no pena de vergüenza sino, pena de sufrimiento. Carajo, saber que no eres la persona que siempre quisiste ser. Verte y no reconocerte, no saber quién mierda eres, no saber qué hacer con tu vida.
Da asco mirar el espejo y sólo sentir odio hacia ti mismo.