¿Crónicas de un alma desgastada?
Por hoy no lo serán. Porque hoy, tú y yo sabemos, que es un día que amas celebrar.
Celebras la vida, tus logros, tus fracasos, tus luchas y tus triunfos. Celebras tus piernas, esas que tanto tiempo te causaron sufrimiento y ahora funcionan y son parte de tu hermoso todo. Celebras tus cicatrices, celebras a las personas que están contigo y celebras a quienes no.
Desde acá, donde estoy, te envío un abrazo con mucho amor, luz y buena energía. Desde acá, deseo que pases un cumpleaños fenomenal y rodeada de las personas que te aman y a quien tú amas.
Faltará un alma, la mía, que no estará cerca tuyo. Pero, como te dije, desde acá, estaré pensando en ti, hablándole al cielo de tu alma, para que la bendiga y la cuida siempre.
Te amo, Alis. Te amo tanto.
Feliz vigésimo cuarto cumpleaños, linda.
Por siempre tuyo, 23.