—Actualidad—
La miró, intentando con su vista borrosa poder reconocerla, y luego rio con burla.
—Claro, te recuerdo. Eres la zorra esa que llegó hace diez años con su madre.
—No, déjame explicarte lo que ocurrió, yo-
—Sí, llegaste a la tribu de solteros, y cautivaste a todos con tu simpatía, con tu falsa inocencia —sonrió acercándose a ella—. Me hiciste creer que sentías lo mismo, que estábamos destinados a estar juntos, cuando lo único que querías, era burlarte de mí y de nuestras costumbres.
—No es verdad, yo en serio estaba enamorada de ti, pero tenía diecisiete años, yo no podía...
—¿Qué divertido era ver lo estúpido e ingenuo que era cuándo estaba contigo, verdad? —le preguntó tomándola del cuello, sin apretarlo, pero sí asustándola—. Qué excitante fue saber que un tipo hubiese sido capaz de hacer cualquier cosa por ti ¿Verdad? Dime, humana ¿Cuántos más te prometieron su vida? ¿Cuántos más te lloraron? ¿Cuántos más te esperaron? ¿A cuántos más engañaste?
—Era menor de edad, jamás quise engañarte o lastimarte. Lo que vivimos fue real para mí también, pero era una adolescente, no podía quedarme.
—Claro, pobre de la pequeña Lía, engañada y ultrajada por un tipo mayor ya —pronunció con burla, antes de soltarla.
—Estás ebrio, cuando estés sobrio-
—Yo no quiero verte, humana. Por mi puedes tomar un avión y desaparecer para siempre. No sé porque regresaste, pero aquí ya no está tu lugar.
—Teníamos nuestra cabaña al costado del río, dónde juramos que estaríamos juntos para siempre... Dónde me hiciste tu mujer —le dijo lágrimas en los ojos.
—Ah, esa porquería, la destruí y la quemé luego de regresar, de haber estado esperándote cuatro horas en la plaza donde me dejaste... Sabes, creo que jamás volverás a encontrar un infeliz con el autoestima tan baja como yo, Lía. ¿Quién puede ser tan estúpido como para creer qué te habías enamorado? ¿En qué dejarías tu mundo por mí? Tú actuaste por curiosidad, yo por...
Gruñó, y luego comenzó a caminar. No pensaba decir aquella palabra, porque se negaba a aceptar lo que había sentido por ella.
Lía lo observó irse, llorando en silencio. Sí, había pasado mucho tiempo, pero no había podido regresar antes.
En donde ella vivía, la mayoría de edad se cumplía a los veintiún años, o así había sido hasta hacía unos atrás, cuando la habían pasado a los dieciocho.
Sería mentir al decir que no había conocido a nadie más, y aunque sí había tenía dos novios, jamás pudo dejar atrás a Ketall. Ni lo que él le había hecho sentir esas casi dos semanas.
Sus relaciones no habían durado más de un año cada una, y estuvo mucho tiempo intentando que le aprobaran el permiso para entrar en la isla, sin poder conseguirlo.
Hasta ahora, que lo había logrado.
***
"—Seré cuidadoso, lo prometo —le dijo mirándola, debajo de él.
—E-Es mi primera vez.
Él bajó a sus labios una vez más, besándola con cariño. Y tendrían muchas veces más juntos, porque ya no podía imaginar su vida lejos de ella.
Ahora sería su mujer, y tendría la familia que tanto había deseado.
En verdad había conocido a muchas, y había participado en muchos Kok'ta, siempre en el grupo de solteros, buscando a su Umi'et, y no la había encontrado, hasta ahora.
Sabía que Lía lo era, ella era la indicada, nadie le había hecho sentir algo igual. Ella era su Umi'et."
...
Sigo actualizando por ella xdouceprisonx que siempre me acompaña, me apoya, desde hace tantos años! Y sigue releyendo conmigo una vez más ❤️❤️✨

ESTÁS LEYENDO
Ketall
Short StoryHistoria corta, libro especial de la serie "Bestias" Inicio 11/02/20