Héroe de otro mundo

Capítulo 66: Compañeros de equipo.

Después de la pelea del pueblo, estuvimos viajando durante algunas semanas hacia la frontera. Luego de analizar la situación decidimos viajar Sokudo, el país del viento. Además de que las técnicas que podía llegar a aprender en ese lugar me interesaban mucho, necesitaría conseguir algún maestro.

Hideki se presento con nosotros de manera mas formal y nos conto un poco de su historia. Era un aventurero de 18 años, el cual vivía en Kyouko de una forma honrada, siempre recibiendo entrenamientos de sus distintos maestros. Pero no fue hasta el día en que su hermana fue secuestrada, que decidió viajar por el país en busca de los culpables. Pero en ese viaje se dio cuenta de muchas cosas. Cosas como eran en realidad los pueblos pobres, los ladrones, los asaltos. En definitiva, estaba muy engañado por la corona.

Nosotros decidimos hacer lo mismo por cortesía, presentando nuestra historia hasta cierto punto, sin incluir detalles como el que venia de otro mundo. Aunque las niñas contaron con lujo de detalle como habían sido rescatadas por mi. La imagen que tenia Hideki de mi parecía haber mejorado aun mas.

Aun no habíamos tenido la oportunidad de entablar un combate real, por lo que no que habíamos puesto en practica nuestros estilos de pelea juntos, aunque estuvimos entrenando juntos bastantes tiempos. Hideki según había visto, era un excelente arquero, por lo que yo me encargaría del combate a primera fila, mientras que el daría apoyo a larga distancia.

Hideki a pesar de ser un peleador, tenia bastantes habilidades mágicas muy destacables. No era su fuerte, pero una habilidad a destacar, era usando su [Magia de sigilo] en la cual podíamos establecer un campamento y ocultarlo con una ilusión, mientras nadie en el interior usara otro tipo de magia mas fuerte, la ilusión se mantendría. Aplicaba lo mismo para alguien del exterior. Así fue como pude conciliar ocasionalmente el sueño.

También había mejorado la eficacia de mis pociones y ungüentos gracias a la ayuda de Hideki, al parecer recibir entrenamiento especial de la academia te hacia un erudito para este mundo. ¿Había algo que ese sujeto no sabia hacer? Incluso el se encargaba de peinar a las niñas, aunque eso no me agradaba del todo, sin embargo, ellas parecían estar bien con eso.

En este momento nos encontrábamos en un campamento cerca de la frontera, apenas había amanecido, por lo que aprovechamos para desayunar y trazar un plan.

"Bien, ¿cuál es nuestro plan?"

"Según he estado investigando y lo que se, usualmente para cruzar la frontera necesitas permisos muy especiales, no a cualquiera lo dejan ir a otro país." Dijo Hideki mientras señalaba la frontera en un mapa a escala que tenia.

Era una gran muralla a travesando todas las montañas, llanuras, cualquier terreno en general. Tenia mínima unos 20 metros de altura y por lo menos 5 metros de anchura.

"¿Y en términos de seguridad?" Ya estaba resignado a la idea de que no podríamos pasar por las buenas, todo el mundo conocía nuestros rostros. Lo mejor era ir viendo que tan fuerte eran sus defensas.

"Usualmente, no mucha gente cruza la frontera, solamente políticos y grandes comerciantes. Por lo que no suele haber un nivel exageradamente alto de guardias, pero debido a que nos han estado siguiendo el paso, es muy seguro que ya hayan pensado en que intentemos cruzar la frontera." Hideki llevo su mano a su rostro como si estuviera intentado analizar cuantos guardias habría.

"¿Eso significa que tendremos que pelear cierto?" Durante este tiempo, habíamos preparado equipo de alto nivel, o al menos "alto" considerando nuestras posibilidades.

"Es lo mas seguro, muy probablemente en este momento todas las fronteras estén repletas de los mejores guardias de la corona, por no decir que incluso podrían haber mando a algún héroe." Hideki parecía preocupado al pensar en esa posibilidad.

"¿Tan poderosos son los héroes? Recuerda que yo también puedo usar sus mismas armas." No le había explicado a Hideki el origen de mi arma, ya que ni yo mismo lo sabia. Solamente le había comentado de las ocasiones en las que la había usado.

"Cierto, pero, aunque tu también puedas usar un arma, no tienes el mismo entrenamiento para usarla." Hideki cambio de postura y saco un cuaderno con información. "Mantener un arma de luz es muy desgastante, aunque tu poder se incrementa demasiado, no estoy seguro de si puedas estabilizarla por mucho tiempo."

"No siento que eso sea algo de lo que deba de preocuparme." Si de resistencia hablábamos, no tenía ningún rival que fuera digno.

"También el poder de un arma de luz varia demasiado dependiendo del portador y otros factores. Son armas que cambian de propiedades según las emociones, dominio y voluntad del usuario." Hideki parecía estar sospechando un poco de mi habilidad, aunque quizá tenia sus razones para hacerlo. Después de todo, el había visto a héroes verdaderos en acción.

Entonces recordé que, cuando usé la espada para pelear contra el Golem de oscuridad, accedí a un poder que jamás había usado antes, fui capaz de purificarlo en el acto. Todo gracias a que la espada opto a mi voluntad. Quizá realmente no tenían un poder fijo después de todo.

"Bien, tendremos cuidado. Si es que llegan a aparecer héroes no peleare sin sentido, necesitamos una estrategia."

"Bien, veamos que he reunido." Justo en este momento, Hideki silbo con sus dedos y poco después apareció un pájaro que se poso en su hombro.

Era el familiar de Hideki, [Kotori] un descendiente de las aves de este mundo. Un pequeño pájaro de un bello plumaje azul, pico amárico y unos cristalinos ojos negros. Había formado un pacto con Hideki desde niños y podía mandarlo a recolectar información a la cercanía sin ser detectado.

Era muy similar al familiar que uso Azumi en la prisión.

Al parecer, la frontera tenia un numero normal de guardias, pero había dos candidatos a héroe y una heroína. Sentí un pequeño deja vu al ver ese numero.

Viendo eso y su ubicación según el familiar de Hideki [Kotori]. Empezamos a trazar todo en el mapa. No habíamos practicado mucho pelando juntos, pero esa seria una excelente ocasión para hacerlo.

"¿Cómo pasaremos a las niñas?" Esa era mi única preocupación.

"Puedes generar una enorme distracción y yo me encargare de cruzar a las niñas, una vez estén a salvo, volveré para ayudarte." Hideki parecía muy orgulloso de su plan.

"....." Sin decir nada, solamente acose a Hideki con mi mirada.

"¿Por qué me miras así?" De pronto Hideki cambio su expresión a una mas nerviosa.

"No juegues con tu suerte." Seguía sin confiar demasiado en el, quizá todo esto era un plan para quedarse con las niñas y entregarme a la ley. Aunque era poco probable que eso pasara en realidad.

Después de discutir algunas opciones, vimos que, en realidad, el que yo actuara de sebo era lo mas ideal. Sin querer termine aceptando.

Apresure a las niñas para que terminaran de almorzar y emprendimos el viaje a la frontera que estaba a pocos kilómetros.

Sin importar si fueranos de día o de noche, el combate seria igual de rudo, por lo que decidimos ir lo mas pronto posible.