Héroe de otro mundo

Capítulo 18: Una luz

Solamente habían transcurrido dos días desde mí conversación con aquella maga, pero desde entonces estuve observando con cautela en busca de puntos ciegos o fallas.

Era notorio la falta de personal, ya que actualmente nadie venía a cerciorarse de que realizara correctamente mi trabajo y el personal que nos atendia cuando teniamos un problema había desaparecido.

Incluso algunos reclusos parecían estar notando la falta de guardias, sin embargo el único modo de disfrazar la falta de seguridad fue aumentando la violencia.

Antes también la usaban, pero eran un poco más considerados, ahora solo por ver a un guardia te llevabas una descarga de alto nivel. Era necesario destacar que una descarga de ese nivel, era suficiente para dejar secuelas a alguien en mí mundo, por suerte me había fortalecido, de otro modo ya hubiera muerto.

Según el informe de la maga, antes solían haber por lo menos unos 15 guardias resguardando las torres y paredes que nos rodeaban, pero ahora ese número se había visto reducido.

También los guardias que solían merodear por los pasillos en rutinas normales había disminuido, realmente estaba empezando a pensar que existía una posibilidad de escapar.

Solamente había un detalle, estábamos a unos días de la visita del Alcaide, eso podía representar un gran problema, necesitaba saber si eso podía interferir en mis planes.

Por eso, en este momento me encontraba en camino a encontrarme con Roger, esa persona podía saber bastante información interesante de este lugar.

"¡Roger!"

Me encontraba en el mismo lugar de los tanques de agua, pero aun así me negaría a pronunciar la maldita contraseña.

"¡Te lo juro! Te arrepentiras si me haces decir esa contraseña."

"....."

"¡Es importante! ¡Puedes salir beneficiado!"

Roger era quizá la única persona de este lugar con la que estaría dispuesto a compartir la información del escape, no por que me cayera exageradamente bien, sino por que era alguien leal y discreto, eso me agradaba.

"¿Acaso es un gran negocio?"

"Ahi estas."

Entonces como si fuera un fantasma, Roger aparecio detras de un tanque de agua, el cual juraba haber visto antes y no había nadie. No tenía ni la más mínima idea de cómo aparecía repentinamente.

"¿Qué sucede? Tenía en mente dejar de responderte si no decias la contraseña."

"Deja esa estupidez de lado, esto es importante."

"¿Qué pasó? Te vez algo agitado."

Necesitaba conseguir informacion y estaba con la mejor persona para eso, aunque en ocasiones era algo infantil.

"Primero, necesito saber algunas cosas."

"La información no es gratis."

"Lo se. ¿Qué sabes sobre la visita del Alcaide?"

La expresión de Roger se tornó confusa, como si no estuviera entiendo mi pregunta.

"No entiendo realmente a qué te refieres."

"Detalles, motivó, número de guardias, horarios, patrones, nivel de poder, necesito saber esa clase de cosas."

"Ya veo, ¿que te hace pensar que se algo como eso?"

No era una apuesta segura, pero cualquier detalle podría valer oro en este momento.

"Por que si alguien aquí puede conseguir información, ese eres tú."