Buscando Redimirme (Remilia x Oc)

Capítulo 12 "Semi-yokai"

-¿Que esta pasando?

-¿Porque no se mueven?

-¡ya empieza la pelea!

Estas y más eran las palabras que gritaba el público, y no era para menos, ya que los participantes no se movían a pesar de haber escuchado la señal para comenzar el combate.

Alone se mantuvo en su posición habitual, con la katana apuntando directamente hacia Jun, mientras que el mencionado de cabello azul oscuro seguía parado sin ponerse en ninguna pose de lucha. Sus manos estaban cómodamente acomodadas en sus bolsillos, demostrando como si no le importase la pelea. Pero sobre todo, lo que más le molestaba al pelinegro, era su cara de absoluta confianza y burla. Parecía estar desafiandole, pero él no caería en la trampa.

Apurarse no serviría de nada, era algo que siempre se decía a sí mismo, y era ahora en donde más tendría que seguir a su consejo, pues se estaba enfrentando a un oponente que en todo lo que llevo de tiempo este torneo, nunca demostró todas sus habilidades. Solamente sabía una, pero dudaba seriamente si atacarle si podía hacerla varias veces.

Esa molesta habilidad, seria su intangibilidad. Aunque le atacará  20, 30 o 40 veces, si cada uno de sus filos lograba traspasarlo, no le llevaría nada y acabaría cansado y debilitado. En su mente, pensaba que así era como había vencido que sus oponentes anteriores. Burlándose de ellos, y obligandolos a ataquerle, a pesar de no tener ninguna oportunidad conectar, y para cuando ya estén completamente cansados, darles el golpe final para llevarlos al mundo de la inconsciencia.

Pero aún sabiendo esto, dudaba de que con un solo golpe pudiera noquear a alguien. Eso solo lo dejo con dos opciones; en primera era que debía de saber todos los p
untos débiles del cuerpo humano, ya que alguna de estas, estaban muy bien escondidas. O en segunda; es que debia de poseer una enorme fuerza.

Sin embargo, si tomaba la segunda como la verdadera opción, tendría que arriesgarse a aceptar que su oponente guardaba más secretos que los que dejaba ver a simple vista. Su cuerpo no poseia las cualidades, para demostrar que era alguien que hacia ejercicio a diario, no, más bien demostraba el de una persona vaga y floja. Su forma de actuar, solo servía para colaborar a esto último. Pero aún así, él logró vencer a alguien como Cirno. Alone por lo mucho que la conocía, sabía que era perseverante y que no se rendía fácilmente, y aún así, fue derrotada. Tal vez el exceso de confianza, fue lo que la llevó a la ruina, pensaba que podía acabar fácil y sencillamente el encuentro como lo había hecho con los anteriores. Pero de nuevo, ahí estaba, en las gradas donde apoyaba a nuestro ojiazul.

Al final, tuvo que quedarse con una resolución a medias. Y fue esa resolución a medias, a lo que lo llevó a esta situación. Fue tal y como lo predijo.

-‘Maldicion, es muy agil’

Varios Cortes fueron lanzados, tanto horizontales como verticales, incluso algunos desde un punto ciego, fintas también, pero todas estas fueron arrolladas por el excelente trabajo de piernas que tenía Jun. Lo más estresante de todo esto, es que seguía como cuando empezó, con la misma sonrisa y las manos en los bolsillos.

La gente gritaba groserías hacia él, pidiéndole que se tome en serio el combate, que si quería montar un espectáculo de circo, lo haga en otro lado. Sus ojos rojos brillaron por un momento, antes de dirigirle una mirada al público, el cual no se inmutó ante esta, solo siguieron gritando hasta que finalmente se callaron cuando el pelinegro cayó con la mirada al piso.

Y antes de que se pudiera levantar, su oponente ya estaba encima suyo. Pero nada de lo que había hecho antes o, en cualquiera de sus otras peleas, lo prepararía para lo que iba a pasar ahora. Él se acercó a su oído, y cuando estuvo lo suficientemente cerca, habló.