22os

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— ¿Cuántos años dijiste que tenías, cariño? —me pregunta atentamente la mamá de Hareum.

— Diecinueve —le sonreí de lado.

Ella me devuelve el gesto y mira a Jaebeom.

— ¿Y tu amigo tiene la misma edad que Hareum y Changkyun? —acerca su taza de café a su boca para darle un trago.

— No —contesté y ella alzó ambas de sus cejas.

— ¿Es más joven? —negué con mi cabeza y ella aparta la taza de su boca para después reemplazarla por una servilleta y limpiar con suave golpes sus labios.

— Jaebum tiene veintiséis años —le contesté y recargué mi cabeza sobre su hombro.

— Pero es solo tu amigo, ¿verdad? —río algo nerviosa y forzó una sonrisa.

— Estamos saliendo —le aclaró Jaebeom algo borde. La señora Jeon abrió sus ojos más de lo normal.

— ¿Y sus padres como lo tomaron? —preguntó sorprendida.

— Mi madre muere por conocerla y Mirae no tiene tanta comunicación con sus padres —le explica Jae en breve a la mujer quien tronó sus labios.

— Y yo que planeaba emparejarte con Jungkook —soltó una carcajada. Jaebeom y yo nos volteamos a ver incomodados, comenzamos a reír sin ganas.

— Que graciosa... —murmuró Jaebeom solo audible para nosotros dos.

Esta señora era peor que mi vecina anciana, se metía en asuntos que no eran de su incumbencia.

— Espero que su relación sea mejor que la de mi hija —soltó un suspiro y ajustó sus gafas, mientras volvía a beber de su café — Hareum le pilló siéndole infiel —abanicó su rostro con su mano— el muy descarado traía chupetones de quien sabe quien en su cuello, no se que hace en nuestra casa, prefiero hablar con ustedes que con el.

Mi boca se quedó entreabierta. Entonces, Hareum sabía que Changkyun se veía con alguien más.

—La pobre estaba peor que María Magdalena, pero tonta, siempre le perdona —negó con su cabeza —espero aprenda de ustedes.

— Seguramente alguien lo ha de haber puesto en su lugar, después de esos hematomas que se carga en su rostro —comentó Jaebeom, acariciando mi muslo —desafortunadamente los chicos que se cargan bonitas caras suelen ser unos cabrones.

— ¿Y tu Jaebeom? Quiero decir, eres muy apuesto, no me digas que tu eres igual —intentó bromear la señora y yo aun seguía fuera de orbita.

El chico de mi lado río.

— No solía tomarme las cosas en serio, por eso nunca tuve algo concreto con alguien, hasta que conocí a Mirae. Creo que se debe amar y respetar lo suficiente como para no hacer esas estupideces —opinó Jaebeom centrado en lo que hablaba.

La señora Jeon suspiró enternecida.

— Ojalá mi niña conociera a alguien como tú —río y me miró a mí — te cambió a tu chico por mi hijo, y se lo dejas a Hareum —bromeó nuevamente la adulta.

Ahora si reí con ganas, pero no era de gracia, era sarcasmo.

— Lamento decirle que su hija no es mi tipo y tampoco tengo ojos para otra mujer que no sea, Mirae. Le pido por favor que no vuelva a hacer bromas de ese tipo —le indica Jaebeom al notar mi gesto.

Quería salir a tomar un poco de aire.

— Lo siento, nunca se me dieron los chistes —se disculpa ella apenada.

poison; Im ChangkyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora