· tres ·

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Querido yo...

Hoy al salir de mi cuarto estaba él, apoyado en la pared mientras jugaba en su estúpido Nintendo. Al verme, abandonó la partida y lo guardó, saludandome alegre, sonriendo.

Desayunamos juntos, caminamos juntos hasta el salón y en todo ese tiempo (hasta que el ojeroso de nuestro profesor llegó), habló sin parar.

Su padre vendría a casa, su hermano mayor en cuanto llega de la universidad se desvela en tareas y a penas convive con él, ayer le ganó a Ashido en Smash y su dentista no dejó de recordarle lo particulares que son sus dientes.

A penas le contesté, como normalmente lo hago y él seguía contándome todo sonriendo. ¿Por qué sólo él hace eso?

Los demás extras al notar que a penas les contesto, se van. Kirishima no, ¿sabrá acaso sobre mis putos sentimientos? No lo creo, pero aún así, él nunca se cansa de mí...

Siempre me sonríe, incluso cuando le insulto o trato de ignorar.

Mierda, me hace esto tan jodidamente difícil.

¿Cómo podría ignorar su sonrisa?

Tal vez su dentista le dio algún tratamiento para sus dientes tan únicos y a consecuencia, hace su sonrisa más brillante para todos.

Debe ser eso.

No es normal que una jodida sonrisa pueda brillar tanto como el puto Sol.

Querido yo...
No te enamores.

no te enamores más.
no te enamores aún más de su sonrisa.

dear me... [kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora