Capitulo 2. Rechazada

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JADE.

No podía creerlo, mi mate, esta aquí. Sentí su aroma masculino a metros de distancias y hasta que no di con su mirada oscura, no supe realmente si era el, la persona que mas he ansiado conocer. Pero al chocar nuestras miradas se pone totalmente serio y sin saber porque se marcha. Me siento hundida, mi corazón late frenéticamente y siento que se me va a salir del pecho en cualquier momento. ¿Pero porque no ha venido hacia mi? ¿es que el no siente lo mismo? Me siento frustrada y un sudor frió empieza a recorrer mi nuca, y eso solo me pasa cuando tengo miedo.

-Jade ¿te encuentras bien? te ves pálida- dios si Amy supiera lo que estoy sintiendo en estos momentos...

-Amy, he visto a mi mate, esta aquí, pero cuando nuestras miradas se han cruzado se ha marchado y no entiendo porque.- Amy me mira sorprendida. Se que es lo que esta pensando, eso no suele ocurrir, normalmente, sobretodo a los hombres, les falta tiempo para acudir en busca de nosotras al primer contacto. Entonces... ¿por que el no lo hizo? Mi nivel de nerviosismo empieza a ser notable ya que Amy me abraza intentando tranquilizarme. Yo simplemente siento que me falta el aire.

-Amy necesito salir fuera unos segundos, necesito asimilar cosas...

-¿quieres que te acompañe?- se que Amy esta preocupada por mi, su cara lo dice todo, y aunque sea mi mejor amiga en este momento lo que quiero es tiempo para pensar, tiempo para mi.

-no te preocupes, estaré bien, tu disfruta de la fiesta con Roby- se que no la he convencido del todo, pero aun asi me deja ir.

A la derecha de la gran sala de baile se encuentra un balcón bastante amplio, me dirijo a toda prisa deseosa por sentir el aire en mi cara y despejar mis miedos. Me apoyo en la barandilla de piedra y froto mis brazos en busca de calor, ya que la noche es muy fría. Siento que esta persona nerviosa, frustrada y con miedo no soy yo, por mucho que me han insultado, nunca me he sentido así. Tanto tiempo queriendo encontrarlo... y no es esto lo que esperaba.

De repente vuelvo a sentir ese olor inconfundible, a tierra mojada, lluvia y menta, ese olor que en un primer momento me hizo enloquecer, un olor tan masculino y poderoso que hincha mi corazón y corta mi respiración. Me giro y ahí esta el. Su mirada oscura es intensa y hace que mi corazón lata rápidamente, su pelo negro y desordenado le da un toque tan sexy que siento mi boca secarse y su cuerpo musculoso hace que quiera correr hacia el y sentir sus poderosos brazos abrazarme, sentir su protección.

Se acerca lentamente hacia mi, yo lo miro embelesada por cada uno de sus  movimientos, pero siento que algo no anda bien, su mirada es dura y sin sentimientos. Siento mi cuerpo temblar y de nuevo un sudor frió recorre mi nuca.

-¿cual es tu nombre?- dios su voz profunda y masculina hace que me derrita, pero su tono duro me da escalofríos.

- Ja- de, Jade Aller- me tiembla la voz y mis manos, ya no siento el frió de la noche. Y de repente lo que menos esperaba y mas temía ocurrió.

-Yo Dylan North, te rechazo a ti Jade Aller como mi mate.- una simple frase, una simple frase hace que mi mundo se derrumbe, que mi corazón duela y el dolor recorra mi cuerpo. ¿por que? es lo que quiero preguntar pero mis palabras no salen de mi boca, no creo que pueda formular ni una sola palabra. Lo miro y por un segundo el dolor recorre su mirada, como si sintiese lo mismo que yo, pero casi al instante su mirada se vuelve dura y fría.

-no eres la pareja adecuada para mi- eso ultimo termina por hundirme aun mas, el simplemente se marcha y con el se va una parte de mi que ni siquiera me ha dado tiempo a descubrir. Y sin darme cuenta lágrimas recorren mis ojos y un sentimiento de soledad y tristeza se cobija en mi corazón y mi mente no logra centrarse en lo que ha pasado, solo en el dolor. Lo único que quiero es huir, escapar de esta pesadilla, no puede ser que mi mayor ilusión haya acabado asi.

Se que no soy demasiado buena, no se luchar soy una negada para eso, no soy hermosa aunque Amy diga lo contrario,yo no me siento asi, ni siquiera soy demasiado inteligente, no tengo nada bueno, y en cierto modo lo entiendo ¿por que un hombre tan atractivo y fuerte iba a querer estar con alguien como yo? no tengo nada que ofrecerle, no soy nada.

Y sin mas escapo de aquí, salgo de la gran mansión y huyo hacia el bosque, me quito los dolorosos tacones y corro sintiendo la tierra húmeda bajo mis pies. Corro y lloro a la vez lo que hace que tropiece y caiga al suelo, ya no me levanto solo dejo que el llanto se lleve el dolor que siento, al poco rato me quedo dormida no sin antes pensar en sus ojos.


North ClanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora