- Aun no entiendo por qué no quieres ir - le dijo Emily - Se ve que es un chico agradable, y además te dijo que era en plan de amigos, no deberías espantarte.
- No estoy espantada, solo no voy a salir con alguien que obviamente tiene novia.
- Lo viste con una chica, ¿y eso qué? Ni siquiera viste cómo se comportaba con ella. Tal vez solo era su hermana.
- No miras con esos ojos a tu hermana, Emily - replicó Charlotte - Es obvio que le gustaba.
- No lo sé hermanita, pero sigo sin entender tu negatividad.
- Solo ve, y avísame si sí va - le dijo - tal vez así me decida a ir.
- No quiero ir a un restaurante yo sola, es depresivo - dijo Emily - ¿Por qué no vas y solo te ocultas hasta que él llegue?
- Porque sé que no va a ir.
- ¡Y entonces para qué quieres que vaya! - le gritó su hermana
- Creí que apreciarías tener una excusa para invitar a Steve el fin de semana de San Valentín - le dijo y la miró con malicia, sabía que su hermana no se negaría a eso.
- Bien... Iré, pero solo porque sugeriste que invitara a Steve. No porque esté de acuerdo contigo.
- Y por eso eres mi hermana favorita.
- Soy tu única hermana, idiota - dijo Emily y la abrazó.
- Qué asco, no me toques, sabes que odio las muestras de cariño.
- Sabes que no es cierto, solo finges ser ruda - le contestó Emily mientras se marchaba.
Cuando su hermana salió, Charlotte se puso a organizar su habitación, recién había comenzado el semestre y ya tenía un caos de documentos por todo el lugar. Sacó su computadora y se puso a revisar redes sociales, era ese fin de semana en que todo el mundo publicaba fotos con su pareja, mensajes bonitos y miles de cursilerías más.
Se recostó en su cama, estaba molesta, con Sergio, con Adam, con ella misma. ¿Por qué una salida de con un chico cualquiera la ponía de ese modo? Claro que antes se sentía atraída por Sergio, pero solo era porque quería dejar de pensar en Adam.
Adam. No, no lo había superado, quería dejar de pensar en él pero cada que entraba a redes sociales veía la notificación de los mensajes sin leer. Que tonta podía ser a veces, no sabía porque se negaba a leerlos, si bien podría no responder, los seguía teniendo ahí, por si algún día se atrevía a mirarlos. Negó con la cabeza, no tenía sentido, si no los quería leer ahora, mucho menos después cuando ya todo estuviera superado; entró a la app de nuevo, fue a los mensajes y sin pensarlo dos veces eliminó la conversación que tenía guardada con Adam.
Miró el reloj, ya eran más de las 4, su hermana debía estar en el Kiosco Mexicano con Steve, le escribió pero no confiaba mucho en obtener una respuesta, sabía que su hermana estaría distraída con el chico que le gustaba. Suspiró y volvió a guardar el celular. Bajó a la cocina por algo para comer y después de coger lo primero que vio, se sentó con su mamá en la sala a ver la película romántica que pasaban en ese momento por la televisión.
Pensó en lo cliché que eran las películas románticas: la chica siempre enamorada del chico deportista que siempre resulta ser novio de la más bella y popular, y después de cualquier cliché trágico, el chico resultaba enamorado mágicamente. Se rió consigo misma, quienes escribían esas películas no tenían ni idea de cómo era el mundo real. La chica nunca conseguía al chico que quería.
Sonó su celular y vio que era un mensaje de Emily que le decía que ya había llegado al restaurante y que no había ni rastro de Sergio por ahí. Aún faltaba tiempo para las 5 así que probablemente solo era impuntual, le iba a contestar cuando le entró otro mensaje de ella diciéndole que dejara de ser cobarde y llegara al lugar aunque solo fuera por la comida.
"No voy a ir." le respondió y volvió a concentrarse en la película. No iría, en plan de amigos o no, ya no quería saber nada de chicos, al menos por un buen tiempo. Estaba sobreactuando, tanto drama solo porque Adam no paraba de hablar de la chica que le gustaba, no la describía pero la mencionaba muy a menudo, tampoco le había dicho su nombre; no la conocía pero Charlotte la odiaba, sin una razón válida, solo porque ella quería que Adam hablara así sobre ella.
Lo que Charlotte no sabía, es que no había una chica que le gustara a Adam, él usaba esa frase para decirle las cosas que le gustaban sobre ella, pero Charlotte nunca lo notó. De hecho, en uno de los tantos mensajes que Charlotte borró ese día, Adam le decía:
@15adam: No existe una chica Charlotte... Siempre que te contaba sobre cuando salía con alguien, esperaba saber qué pensabas al respecto, una parte de mi quería que te gustara y solo buscaba ponerte celosa... Pero siempre te alegrabas por mí y eso me hizo creer que yo no te gustaba... Lamento si algo de eso que dije te hizo sentir que no me agradabas.
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A 400 TEXTOS DE DISTANCIA
RomanceA veces te encuentras con la persona perfecta en la distancia equivocada.