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La casa comienza a hablar de nuevo. Los chicos ríen y bailan restregándose el uno con el otro, besándose contra las paredes con un vigor renovado y algunos se quedaron viendo en mi dirección. Mi corazón late con rapidez, siento mi cabeza doler y no puedo respirar.

— Tae — llama Namjoon —, ¿te sientes bien?

Había salido de la gran mansión, me encontraba en el cesped sin saber como llegar a mi casa. Las calles están oscuras con un toque de desolación, lo único que resaltaba de este barrio era las luces de colores que salían por las ventanas y la música de Galantis.

Quiero decir que me encuentro bien. Que las palabras de Jungkook no me habían afectado. Mi pecho subía y bajaba con dificultad, mi reacción era totalmente diferente cómo quería sentirme.

— Discúlpame Nam, no quería armar todo este drama — suspiro con los ojos cristalizados —, yo no pude soportar ver como la humillaban y nadie tomaba el valor para detenerlo.

Él se encogió de hombros.

— Descuida pequeño — acaricia mi cabello y me da una mirada de compresión —. es solo un juego, no debiste meterte.

— ¿¡Escuchaste lo que le dijo!?— le pregunto indignado por la forma tan indiferente en la que había hablado —, ¿Como esas personas pueden ser amigos tuyos? No lo entiendo, creí que tenías mejores elecciones.

— Si, lo escuché Taehyung — toma asiento a mi lado, da un suspiro largo frotándose el rostro —, ellos no siempre son así. Jungkook él-él puede ser un tanto..

— ¿Gilipollas?

Mi hermano rio por lo bajo.

— No tengo tanta confianza y no quiero tenerla, Jungkook puede ser peligroso ¿Si? — me advierte con la mirada —. a veces los cables se le cruzan, puede ser la persona más insoportable, como también puede mantener su distancia sin molestar a nadie.

— ¿Peligroso? — arrugo el entrecejo sin poder creerlo —, le acabo de meter el peor puñetazo de su vida y no hizo más que querer humillarme.

— Pero no lo logró — puntualizó. Asiento con orgullo —, tu caracter puede llevarte a lo alto Tae, pero has herido el ego de todos los de la fraternidad y en eso incluyo a Jeon. Él ha puesto los ojos en ti y hará de tu vida una pesadilla.

— No le tengo miedo.

No digo que lo tengas — sus labios se forman en una línea recta—, si algo llegase a pasar entre ustedes, debes venir y contarmelo ¿va? — asiento sin mirarlo a los ojos —, es hora de irnos.

Conocía a mi hermano a la perfección, a pesar de no llevar tanto tiempo viviendo con él, lo conocía, y sabía que la situación es demasiada complicada como para seguir hablando de eso toda la noche. Mientras conduce a casa, las calles silenciosas y oscuras como los ojos de Jungkook vuelven los recuerdos de esta noche.

"No tienes ni voz ni voto"

"Debe ser difícil vivir bajo la sombra de tu hemano"

"Taehyung eres la estrella de este lugar"

La voz de una mujer hace eco por mi cabeza. Había hecho cambios radicales en mi y eso implicaba dejar de brillar, desde hace mucho que "resaltar" no era mi objetivo en la vida. Aprendí a sobrellevar el dolor en mi pecho y los vagos recuerdos. Quiero creer que lo he superado. Que aquella persona se había borrado de mi vida y del mapa.

Y ahora soy un nuevo Kim Taehyung.

Namjoon estacionó su coche en la puerta de nuestra casa. Me abre la puerta indicándome que baje, por un momento me perdí en muchos recuerdos y metiendo algunos nuevos. Estas son las razones por las cuáles me siento bien alejando todo aquello que me estaba perturbando.

Black Swan [kooktae] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora