Black Swan [kooktae]

13

— ¿Sin piña?

Creo que nadie me creería si les contara sobre esto. No los culparía en realidad, ni yo mismo lo creo, sigo pellizcando mi brazo intentando despertar de este raro
sueño.

Jungkook está sentado al frente mío y no específicamente para tirarnos insultos o armar alguna disputa por la piña en la pizza. Él iba con la mejor intención... O eso pienso.

— Odio la piña en mi pizza — digo rápidamente.

— Dime algo que no odies.

— Unicornios.

Él sonríe, no una sonrisa normal. Parece más una mueca que una risa, pero lo intenta, quiere reír de mi tonta respuesta. La pizza llega y es sin piña. Jungkook toma un trozo debido a mi insistencia, no pienso morir envenedado y las señoritas del lugar parecen conocer perfectamente a este lunático.

— ¡Delicioso! — digo en voz alta cuando le di una enorme mordida a la deliciosa pizza —, es lo mejor de la vida.

— Creí haberte escuchado decir eso cuando te compraron las gomitas.

— Lo segundo mejor de la vida — añadí.

— ¿Hay tercero?

— Unicornios — digo irónico. Él me mira con el ceño fruncido —, ¿Coca cola? No lo sé, cuando lo descubra te contaré.

El asiente y come otro bocado.

— ¿Siempre has sido mejor amigo de Seokjin?

Él me mira sorprendido y luego gira su cabeza, como si estuviese esperando a alguien. No me importaria que Yugyeom entrara por esa puerta y se llevara a Jungkook, mientras la pizza no sea arrastrada junto con ellos.

— Desde hace cuatro años — dijo sombríamente volteando—, ¿Y tú?

— Desde que está con mi hermano, duh.

Él se ríe.

— ¿Tienes planeado algo para el futuro? — me sorprende que lo pregunte. Tengo grandes ambiciones en la vida, puede que después de tres años esté viviendo al máximo mi vida y ser uno de los mejores arquitectos de la historia. Mamá dice que todo en esta vida es recompensado, pero a veces creo que no merezco nada bueno —, ¿Taehyung?

— Quiero recorrer el mundo — me encojo de hombros cuando Jungkook me miro inexplicablemente —, ¿Qué? ¿No puedo soñar en grande?

— Eres alguien muy raro, pero no discutiré sobre eso. Me agrada de alguna forma.

Me toca reír.

—Eres muy molesto — me quejo — Sé que es una tontería, pero estuve ahorrando todo este tiempo. Mamá me ha ayudado en algunas cosas y...

— Tu mamá debe amarte tanto como para apoyarte en tal tontería.

Su tono de voz no es borde. Es nostálgica y apagada. El corazón se me estruja, puedo entender ese vacío, la falta de una madre en la vida es como andar sin nada en la vida. Agradezco mucho por tener ahora a Lee Hun conmigo.

— ¿Qué vas a ser tú?

Quiero cambiar de tema. Jungkook vuelve a su forma habitual y me mira de reojo.

— Quiero trabajar en Busan — dice con simpleza —, ¿Regresaras a filosofía?

Hago una mueca mordiendo la pizza —, no lo creo, ya hice el retiro.

— ¿Y si lo deshaces?

— Jungkook ya pagué el dinero.

El me mira resignado y asiente. Estoy pensando en volver a retomar el curso, quizás me puedan hacer un reembolso. Solo falte a tres clases, puedo retomarlo, pedirle a Jungkook sus apuntes y pedirle de rodillas a Chen regresar a su fantástica clase. Chen amaba los gatitos, podría regalarle uno.