Black Swan [kooktae]

53

Nunca quise obtener noticias de mis padres.

En estos momentos es lo menos que quisiera, pero ahora que escucho la pregunta provenir de mi especialista siento que merecía más que conformarme con el simple hecho de saber que existen. Obtener noticias sobre ellos seria más fácil que cualquier cosa, puede que sean culpables de todo mi horror vivido en cuanto se trata de mi pasado.

Algo que comprendí de madurar; es dejar ir todo lo que te hizo daño. Un sabor amargo se instaló en mi boca y le doy un sorbo a mi botella de agua.

— ¿Tienes tus debates mentales? —lo veo desenvolver un caramelo de limón y mirarme con clara preocupación.

Mi mente tiene una respuesta fija, muy diferente a la de mi pecho cual iba encogiéndose debido al miedo. Algo en mi no se sentía listo para enfretarlos. Pero más allá de mi mente y el rencor que puedo tenerles, quisiera verlos. Incluso llegar a preguntarles; ¿Había hecho algo mal?

— Estoy seguro que usted sabe la respuesta, no respondí rápido y usted es bueno leyendo mentes.

Veo como suelta la envoltura en la canasta pequeña de metal y asiente—. Mi madre me dijo que ser psicólogo me volvería loco.

— Quizás usted necesite ayuda.

— Posiblemente, joven Kim — junta ambas manos sobre sus pierna, creyendo que se daría por vencido ante mi falta de interés en todo este proceso, dice —, deberías por lo menos visitar a tu madre.

— La veo todos los días en mi hogar.

Él suspira fuertemente —, la que te dió la vida.

— La misma que intentó distruirla — añadí con desgano. No entiendo a mi psicólogo, por un lado estaba si lado agresivo en el cual me dictaba que merecían todo lo malo y ahora me habla de mi madre como si saber que ella existe no fuera suficiente —, Lo siento. No me apeteció saber nada de ella durante años y no creo que tengas las fuerzas suficiente para ir a buscar a alguien que nunca le importe.

Sé que comprende, pero ser psicólogo en su totalidad no es solo comprender. Es buscar soluciones, ser una ayuda para mi mente y para mi vida —, ¿Cómo lo sabes?

— La clínica obtuvo mi número y me dió un aviso — contesto queriendo restarle importancia —; no creo que ella quiera verme. Si fuera de esa forma, ya hubiera estado buscándome.

— ¿Cómo sabes que no lo hace?

Siempre sabía que responder. Al oír la campanilla de la sesion finalizada tome mis cosas con rapidez sin responderle aún. Es imposible influenciarme, lo poco que puede hacer es suspirar con resignación—. Buena charla, nos vemos el próximo Jueves.

— Sabes que va a ser tu última sesión, ¿No?

Antes de abrir la puerta, me giro viendo su expresión de serenidad y preocupación—, Sigo mal de la cabeza.

— Es tu naturaleza.

— Podría tener una recaída.

— Kim — advierte.

Me encamino a salir y sonrío—, estaré bien, Sñr. Lee.

Cuando estoy por cerra la puerta del consultorio siento mi cuerpo golpearse con otro. Estaba listo para soltar los insultos que Jungkook, Jimin y Mark me habían enseñado todo este tiempo, pero me quedo de pie al ver a Kim Hyunah frente a mi. Creí que me iba a golpearme en cuanto la veo fruncir el ceño como si fuese el peor ser existente, pero entro en calma cuando deja de fruncir el ceño y suaviza su rostro neutral mente. Ella parece escanearme y retrocedo cuando siento que estamos demasiado cerca el uno al otro.