CAP 25 DI QUE SÍ

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-Quien molesta tan temprano... -Chris se movió con enfado sobre su propio lugar, abrazándose con más posesión a la esponjosa y suave almohada humana que yacía encerrada entre sus brazos, rehusándose a tener que despertar sólo para atender una tonta llamada telefónica.

-Fer, apagalo... -Nat ronroneó molesta mientras fruncía las cejas y se escogía más contra el cuerpo del rubio que se encontraba durmiendo pegado a su espalda.

Rogers volvió a acurrucarse detrás de Nat mientras ella hacía lo mismo, encajando sus caderas justo sobre las de Chris a quien no le importó recorrer las curvas de su cintura con su mano para atraerla a él con ternura y hundir su mentón en el hueco de su cuello, el cual olía malditamente delicioso al igual que su cabello rubio y enredado. Ambos se permitieron suspirar para seguir disfrutando del calor que se proporcionaban mutuamente para seguir durmiendo un rato más. Sin embargo, Chris no dudo en recorrer su nariz sobre la piel de su cuello, causando que su barba le produjera algunas cosquillas y a la vez que ella se encogiera de hombros con una bella sonrisa enmarcada en su rostro.

-Deja dormir, Fer... -Nat chilló divertida aún sin abrir sus ojos para después ladear un poco su cabeza en dirección a él quien esta vez no tardó en plantar un suave beso sobre su mejilla, seguido de un abrazo protector que la apretó del vientre un poquito, acomodando su trasero dentro de la hendidura de sus caderas y su espalda contra sus pectorales desnudos.

Tanto Nat como Chris aún adormilados no dejaban de pensar en la idea de despertar cada mañana acurrucados entre sus brazos, sintiendo la boca del otro recorrer la suya, saboreando y mordisqueando sus labios con pasión y necesidad de tatuar sus besos sobre sus pieles, sobre sus bocas, sobre cada rincón de sus cuerpos... Disfrutar de la mezcla de sus alientos cálidos aquella mañana sólo los hizo saber cuánto deseaban besarse de nuevo, probar sus labios una vez más y permanecer en los brazos del otro por el resto de sus vidas... Ese pensamiento estuvo a milímetros de hacerse realidad hasta que el tono de una llamada entrante en el celular de Chris interrumpió aquel instante romántico entre ambos. OTRA VEZ...

-¡Argh! -Rogers gruñó frustrado, soltando el abdomen de Nat para separarse de mala gana de ella, girar y dejarse caer boca arriba sobre la cama, dejando a una rubia fingidamente dormida con una enorme sonrisa divertida dibujada en su boca.

Nat aún sin abrir sus ojos sintió al hombre tras ella cubrirla un poco más con la manta, para después sentarse enfadado sobre la orilla de cama y tomar su celular del buró mientras ella se hacía un ovillo y se abrazaba a la manta aún de espaldas a él.

-Rogers... -Soltó irritado al tomar la llamada, quedándose por varios segundos frío y en silencio en su lugar, haciendo que Natalie se extrañara en seguida y girara para encontrarse con él, pero en cuanto estuvo boca arriba sobre el colchón Chris ya se encontraba encerrado en el baño de la habitación.

-Chirs, habla Maggie. Cariño llegaré mañana a la ciudad, necesitamos hablar. -Fue la voz de Margaret la causante de que toda la sangre de Rogers comenzara a hervir por sus venas, causando que su cabeza comenzara a latir como si fuese a reventar como si fuese un volcán en plena erupción.

-¿Cariño? ¿Cómo pudiste, Margaret? -Chris no pudo evitar levantar la voz y golpear con su puño el tocador del baño, causando que del otro lado de la puerta Natalie se alarmara y corriera hasta la puerta para intentarla abrir, pero ésta ya tenía puesto el pestillo.

-Escucha, Christopher. Llegaré el sábado, debemos hablar. Hay muchas cosas que debo explicarte. -Maggie intentó dialogar, mostrándose serena y despreocupada lo que causó que la rabia de Rogers se hiciera cada vez más grande.

-¿Qué se supone que dirás? ¿Más mentiras? Él como me viste la cara de idiota, en como te burlaste de mí y me utilizaste, en como jugaste conmigo, con mis sentimientos, con mi familia... No tengo nada que hablar contigo Margaret, la nota del periódico fue bastante clara, lo nuestro se terminó. ¡LO QUE TENÍAMOS SE ACABÓ! -Chris no pudo evitar gritar mientras sentía la impotencia y lágrimas asomarse en sus ojos azules cristalinos.

🍷IN THE SHALLOW🍷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora