🍷IN THE SHALLOW🍷

CAP 40 SIN TI

Habían pasado exactamente 3 semanas desde que aquel horrible incidente cambió la vida de la familia Stark y la familia Rogers. Tom había conseguido despertar a la segunda semana de haber sido intervenido, saliendo de terapia intensiva para finalmente ocupar una habitación muy cerca de la de Rogers quien debido a la caída que había sufrido se había lesionado nuevamente las costillas. Está vez Sarah tuvo que intervenir con todo el dolor de su alma y a pesar de ver a su hijo destrozado para que se quedara en cama y pudiese recuperarse. Todo ese tiempo que había transcurrido mas lento de lo normal habían sido el castigó mas doloroso que Lizz y Chris hubiesen recibido, la vida ya no tenía color y la tristeza, culpa e impotencia vivían incrustadas en sus pechos en cada momento del día.

-A Natalie no le gustaría verte así, amor. Come un poco. -Buck se encontraba junto Lizz en la cafetería del hospital.

En las últimas 3 semanas y después del funeral, Elizabeth se había rehusado a regresar a la casa de los Stark, ni siquiera el abuelo consiguió hacerla cambiar de opinión. La ceremonia fue pequeña y las cenizas le fueron entregadas para ser esparcidas junto a las de su madre cuando estuviese lista para hacerlo. Mientras que el cuerpo de Elena si había sido enterrado en el cementerio del condado, absolutamente nadie había asistido, se dio la orden y con ayuda de el inspector Coulson el proceso pertinente se llevó a cabo.

-Me han dejado sola... -Lizz soltó en un hilo de voz y comenzó a llorar silenciosamente de nuevo, mojando la mesa entre ambos con las enormes gotas que no paraban de salir de sus ojos color verde ahora opacos, hinchados y sin vida.

-No estás sola, amor. Me tienes contigo, tienes a mamá también, al abuelo y los demás. -Sebastián sintió su corazón encogerse, movió su silla junto a ella y la envolvió en sus brazos para que pudiese llorar sobre su hombro.

-Solo quiero que todo sea como antes, quiero la vida que teníamos antes de venir aquí. -Lizz sollozó contra su cuello y se abrazó fuerte de él.

-Nada volverá a ser como antes, pero vendrán tiempos mejores para nosotros, nena. Ahora, por favor, toma por lo menos un poco de jugo y después subiremos a ver a Tom. -Buck finalmente la convenció de darle unos bocados a su fruta picada mientras no paraba de llorar para después ir con su hermano.

Elizabeth sintió el brazo de Buck guiarla por la cintura hasta el elevador en donde tuvo tiempo de pensar en lo que sería su vida de ahora en adelante. Ni siquiera se había podido despedir de su madre o padre y ahora ya no tenía a ninguno de los dos, le habían arrebatado todo sin siquiera permitirle disfrutar un poco de lo que era tener finalmente una familia y luego estaba Natalie, su hermana mayor, a quien definitivamente extrañaba más que a nadie en el mundo. Lizz sólo quería volver a estar con ella y pasar tiempo juntas como antes, charlar, reír, bromear y llenarse de mimos. Su corazón estaba incompleto y roto al igual que él de toda la familia, pero Chris... Chris era quien más preocupación producía en todos ellos, no comía, no dormía, no hablaba con nadie, simplemente se la pasaba acostado en su cama llorando en silencio durante las noches, mirando por la ventana de su habitación con la visita perdida... En más de una ocasión las enfermeras del hospital habían tenido que sedarlo para dormir e hidratarlo con suero...

Realmente dolía, dolía en lo más profundo de su ser y no había nada que pudiesen hacer para remediarlo, más que esperar a que ella despertara y saliera finalmente de ese sueño que la mantenía atrapada dentro de su propio cuerpo.

-¿Cómo te sientes hoy hermanito? -Lizz se sentó a su lado sobre la cama y se permitió observar el semblante pálido de su rostro, ojeras profundas, labios partidos y ojos entristecidos.

-Creo que me siento un poco mejor. -Tom intentó sonreírle a su hermana, pero en su lugar fue una mueca de dolor lo que salió de sus labios.

-Habla conmigo, Tom... -Elizabeth acarició sus mejillas y sintió sus lágrimas de dolor mojar su palma.