Park/Kim Jimin y Namjoon

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Tercer universo.


Necesito explicaciones coherentes a mi situación.

También necesito que alguien me explique ¿cómo es que termine rodeado por gente de una época pasada que me mira como si fuera un bicho raro? La mujer no ha quitado su agarre de muerte de mi brazo y ese brazo en especial me duele muchísimo. Es el brazo con el que impacte al caer y no me atrevo a quejarme porque un hombre muy intimidante no me ha quitado la mirada de encima y se abre paso entre la multitud que me rodea.

Trago duro, ese gran hombre no se ve amistoso.

—Señora, ¿dónde me trajo? —pregunto por lo bajo separándome de su agarre doloroso.

Una ráfaga de aire caliente impacta contra mi espalda y recién noto que tras de mí hay una gran fogata.

Mis ojos se abren ampliamente.

¡Noooo me van a tirar a la hoguera! ¿Cómo saben que soy gay? ¡Creí que no se notaba!

—Explícanos cómo llegaste aquí —pide el hombre corpulento mirándome fijamente y en su mano derecha tiene una espada y en su espalda carga un arco y muchas flechas.

—Un fantasma me ayudó a llegar aquí. ¿Han visto a Park Jimin? Es bajito, rubio y tiene una buena retaguardia y cuando sonríe sus ojos desaparecen.

—¿Estás segura que es él?

—Claro, la profecía decía que un chico de pelo azul sería el que nos salvaría.

—Señora, soy teñido —confieso avergonzado.

—Se ve torpe.

—¡Oiga, puedo escucharlo!

—¡Cállate! —gruñe el hombre y asiento intimidado—. Si dices que es él, entonces te creo. Pero intenta que el chico se cambie de ropa y entrégale algo para que se cubra, no quiero que lo reconozcan y lo maten antes.

—¿Qué me van a matar? —exclamo horrorizado. 



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—¡ESTOY EN CASA! —exclama Jimin entrando sonriente.

—¿Qué haces aquí Kim Jimin?

—Ahora es Park Jimin, me acostumbre —se encoge de hombros el rubio.

—Seguro llamaste la atención con ese color de cabello tan extravagante.

—¡Oye! —se queja Jimin ofendido—. Vengo de visita después de tanto tiempo y ni siquiera te atreves a saludar a tu hermanito menor como se debe, me dueles Namjoon y yo que te he extrañado tanto —lloriquea haciendo pucheros.

—Ese mundo te hace extraño, no solías ser tan dramático —menciona el moreno con una leve sonrisa.

—Ese mundo es actualizado, ya extraño el Internet.

—Ven a darme un abrazo, Jiminnie, te extrañe mucho —admite Namjoon extendiendo sus brazos y Jimin rápidamente abraza a su hermano.

Habían pasado varios meses desde la última vez que se vieron.

—¿Todo marcha bien? —pregunta Jimin luego de separarse.

—No lo creo. Hace algún tiempo se ha estado rumoreando que una chica de pelo azul viene a salvarnos como lo dice la profecía, es una estupidez que todos creen, ese brujo ni siquiera existe.

—Yo sí creo en él, antes de irme escuche que el brujo envenenó al rey y que por esa razón está tan enfermo.

—¿Cómo puedes creer en algo así? Ni siquiera saben exactamente lo que es. Te creería de ser algo concreto, pero nadie sabe nada de esa persona y el rey Min tiene sus buenos años encima —bufa el mayor—. Todos saben que el correr de los años viene con dificultades y eso Jimin, se llama vejez —musita Namjoon con el ceño fruncido—, no creo en ese brujo. Me conoces, si lo veo es real y sino no existe. No me baso en rumores de pueblo.

—Nam, a veces debes dejar de ser tan objetivo. La magia sí existe sino ¿por qué crees que puedo ir y venir? ¿Podrías explicar de forma lógica esto? —señala sus manos y su hermano suspira.

—No olvides el motivo por el cual vas y vienes, Kim —Namjoon voltea para servirse un vaso de agua—. ¿Cómo están los Park?

—Son todo lo que siempre quise, Nam —sonríe el menor—, y realmente espero que en nuestra otra vida podamos tener los mismos padres amorosos que Jimin tuvo —su mirada apenada no alcanza a ser vista por su hermano por lo que se recupera rápidamente para no preocupar al mayor—. Tengo novedades que podrían interesarte. Allá tienes una buena relación, Namjoon, una buena vida. ¿Quieres saber con quién?

—¡No! —exclama Namjoon horrorizado para luego cambiar su semblante a uno más relajado—. Aquí soy miserable y si por allá todo marcha bien no quiero saberlo. Solo espero que ese Namjoon sepa valorar a la persona que tiene a su lado, porque aquí, ya destrozaron mi corazón. 




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