Obsesionados contigo [Trilogía murderous family II] (CORRECCIÓN)

†Asesino: Capítulo 5†

Sin tituto (el internet está jugando contigo).

†Victoria†

-¡Victoria, muevete!- grita mi madre tras la puerta.

-¡Ya voy!

Si, hoy es mi primer día de clases, tengo los nervios hasta el cuello y la falda creo que está muy corta. ¡Odio este uniforme! Es horrible en muchas maneras.

Me subo las medias hasta mis muslos y luego tomo la mochila para salir de mi habitación. Bajo las escaleras y llego al comedor.

-Buenos días padre.

-Buenos días pequeña, no creo que te de el tiempo a desayunarte aquí- dice y me pasa 20 dolares.

-Vale, ¿crees que me veo bien?- le pregunto y él sonríe.

-Eres la más bella, las chicas te envidiarán- ajá, como no.

-Si y ya empecé a odiar esa escuela- susurro y camino hacia la mesa para tomar un poco de agua- adiós madre.

-Adiós- dice con su tono frío.

Si supieran el sermón que me dio la vez que Nicolas me trajo a casa después de lo sucedido. Lloré toda la noche y al día siguiente ni siquiera me quería levantar.

No les voy a mentir, tenía mucho miedo, pensé que me iba a secuestrar o algo por el estilo. Él me asustaba y me asusta como no se imaginan porque ahora lo vez medio sonriente pero luego te mira como si te quisiera matar haciendo que pierdas las palabras y digas tonterías gracias al miedo que emite.

Al salir veo a Thomas y otra vez me saluda con una sonrisa que oculta muchas cosas, no le saludo y fijo mi vista a la chica quien se para al lado de Thomas y por igual me saluda con las manos, luego le susurra algo a Thomas y este deja de sonreír y mira a su izquierda por donde viene Nick.

No se ve muy contento y ni siquiera voltea a verme, solo entra al auto sin decir nada, solo llega y se mete.

¿Tal vez se haya rendido? ¿Habrá servido de algo que le pusiera periódico a la ventana? Ja, río al pensarlo.

-Victoria, estamos tarde -dice mi padre sacandome de mi trance.

-Vale, vale, ya voy.

Me subo al asiento de copiloto y luego saco mi celular para tomarme fotos en Instagram.

-Ponte el cinturón, ¿por qué tengo que repetirtelo?- dice y con molestia me lo pongo.

-Ya, no lo tienes que volver a decir.

-Espero que mañana no se repita- dice.

-Si, me pondré el cinturón sin que me lo digas- digo y me tomo las dos primeras fotos, pero no me gustan.

Parezco una mona.

-No hablo del cinturón- dice poniéndose serio.

-¿No?

-No, hablo de esos muchachos, no quiero que te acerques a ellos, ni siquiera los mires.

-¿Por qué no?

-Me han contado mucho sobre esa familia y suelen decir que no son confiables. Solo no te acerques a ellos y si desobedeces no tendré de otra que ponerte a un guardaespaldas.

Dice y me quedo frisada.

-Yo no quiero tener a un huele culo- diablos se me salió la palabra.

Él se detiene de golpe y siento a mi pobre corazoncito latir a mil.