Contra lo desconocido. #1 [TERMINADA] #PGP2020 #GAY

Capítulo 26:

24 Octubre, 2019.

—¿Y qué estás estudiando exactamente? —Le preguntó Javier mientras removía los cereales.

—Estoy haciendo un grado superior en agencia de viajes y gestión de eventos —Respondió David—. Por el momento está interesante, pero a saber cómo son los exámenes aquí. Solo espero no tener que hacerlos en valenciano, porque no tengo ni idea...

—Se aprende a chapurrearlo bastante rápido, te lo digo yo. —Le garantizó Javier.

—¿No eres de aquí? ¿de dónde eres?

—De un pueblecito de Teruel. Ni te molestes en buscarlo en Google Maps porque no aparece.

—Qué putada.

—¿Y tú qué? ¿tienes alguna novia por Madrid?

—Que va, por el momento paso de tías. Ya me están trayendo suficientes problemas.

David lo miró de soslayo, pero él no le devolvió la mirada. Mientras sus compañeros conversaban animadamente mientras desayunaban, Adrián se preguntaba qué había hecho mal en la vida para merecer aquella desgracia. Primero David se presentó en su casa con las maletas y le alquiló la habitación a Irene, pero lo peor sin ninguna duda, era que Javier se hubiera hecho amiguísimo del enemigo. Debería haberle contado quién era David en cuanto tuvo oportunidad, pero simplemente no se le pasó por la cabeza. También estaba lo de Alejandro, había hecho todo lo posible por no encontrárselo y de momento parecía que era lo único que le estaba saliendo bien.

—¿Y cómo era Adrián en el colegio? ¡Necesito saberlo!

—¡Y una mierda! —Saltó Adrián—. David como le cuentes lo que tú y yo sabemos te juro que te corto la lengua y me hago una corbata con ella.

—¿Qué pasó? Ahora sí que me lo contáis porque yo no puedo quedarme así. —Exigió Javier ansioso.

—¿Se lo cuento? —Le preguntó David.

—Como se lo cuentes... —Advirtió.

—Se lo cuento. —Sentenció—. Pues verás, fue cuando estábamos en la secundaria, me parece que fue cuando estábamos en tercero de la ESO...

Javier celebró la victoria junto a David. Ambos chocaron los cinco mientras Adrián los fulminaba con la mirada deseándoles todo mal. Sacó su móvil para que no tener que soportar la humillación de aquella historia. Parecía que David había comenzado a convertirle la convivencia en un infierno antes de que pasara la primera semana de reflexión. Nadie le había hablado en toda la semana, así que cada vez que entraba en la red social se encontraba con el chat de Alejandro con un candado. ¿Le habría escrito? No quería saberlo, no necesitaba sentirse también culpable por no responderle.

—...se le declaró en mitad de un examen de matemáticas. De locos, sacó un ukelele de su mochila y le cantó su canción favorita de reggaetón. —Javier abrió la boca sorprendido—. Es que piénsalo, se le ocurrió cantarle "fanática de lo sensual" con un ukelele y delante de todos.