Erkenci kus Capítulo 51 (perspectiva de Can)

"LA MARAVILLA DE ESTAR JUNTOS/ UN REGALO DEL CIELO"

Capítulo 51 (perspectiva de Sanem)

Parte 15 "LA MARAVILLA DE ESTAR JUNTOS/ UN REGALO DEL CIELO"

Sus caricias relajan mi agitada respiración, las yemas de sus dedos suben y bajan por mi columna compartiendo su paz y su tranquilidad, al fin descansaba. El jet lag era algo que nunca pensé que podría importarme, ni si quiera lo había pensado, pero en este último año lo había padecido mucho, solo gracias a Can había conseguido entretenerme en esas horas de desvelo. Estaba segura que si seguía así iba a ronronear.

- ¿Estás dormida? - susurra en mi frente. Inhalo su extraño y reconfortante aroma, mi cabeza descansa en su pecho sobre el tatuaje de albatros que tanto amo.

- No... ahora menos podré dormir...- respondo riendo. Su suave risa hace retumbar su pecho, mi lugar favorito.

- Es una magnifica forma de pasar los desvelos, admite que tenía razón... - susurra quitando mi cabello de mi mejilla.

- Eres un travieso- contesto besando su pecho y acomodando mi cabeza otra vez. Hago dibujos sin sentido en sus abdominales marcados, era tan hermoso, me encantaba tocarlo, sentirlo siempre abrazándome y besándome.

- ¿Te gusto tu regalo de cumpleaños? - pregunta sin dejar de acariciarme. Una de mis piernas esta sobre las de él, la sabana esta enredada en nuestras cinturas en la enorme cama de donde cuelgan vuelos de tela blanca y suave... parece un sueño hecho realidad.

- ¡Me encanto! - contesto apoyando mi barbilla en su pecho para mirarlo a los ojos. - los pendientes de diamantes son preciosos y jamás pensé que llegaríamos aquí para el final, aunque también me asustaba un poco que no lo hiciéramos, siempre quise venir. Todo es muy hermoso.

- Me alegra que te gusten y que al fin llegamos, haría lo que sea por hacerte feliz... - sonrió mientras besa mi frente recordando el año pasado, el año que el no estuvo y mi cumpleaños no significo nada... - te lo debo...

Se pone serio, veo en sus ojos que está pensando en lo mismo que yo. Ese año desperdiciado de momentos felices, mis ojos se llenan de lágrimas por el recuerdo de ese vacío asfixiante, dolor constante que desbordaba mi alma.

- ¿Hiciste algo en tu cumpleaños cuando no estuve? - pregunta en un susurro. Su voz se corta, como si le doliera mencionar esas palabras, sus brazos me rodean por mi espalda. Respiro hondo.

- Pues... Yguit y Deniz organizaron una fiesta en el jardín, yo no quería, pero insistieron. Todos estaban ahí, mis padres, la hermana Mihriban, Muzo, Ceycey y la Señora Huma, mi hermana y Emre, Deren y Bulut también; cuando me dispuse a abrir los regalos Yguit insistió en que abriera el de él primero, era un collar muy parecido al que tú me habías regalado. Mi cerebro se apagó en ese momento, cuando reaccione estaba acostada en mi cama, no podía dejar de llorar, te extrañaba mucho. Deniz me conto después que había tirado el collar al suelo, me había levantado y me fui corriendo de ahí, me encontraron en el bosque llorando. Mihriban le pidió a Yguit que no volviera a hacer algo así, que acababa con mi calma y era una crueldad por su parte, no salí en una semana de mi habitación porque era demasiado difícil empezar otra vez el proceso de estar en paz en mi interior, solo dejaba entrar a Deniz y Leyla ya que ella controlaba mi medicina y mis comidas; tiempo después Yguit me pidió una disculpa, solo le pedí que no lo mencionara jamás... - le cuento abrazándolo fuerte como recordatorio de que el estaba aquí.

- Lo siento mucho mi amor... - susurra acercándome a él para besarme; con una mano limpia mis lagrimas sin dejar de besarme- perdóname, ¡perdóname por favor!

- Eso ya está en el pasado Can, - le sonrío, odiaba que se sintiera culpable - ahora estamos juntos, estoy muy feliz por eso. ¿Tu hiciste algo?