CAP 20: Punto de mira

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POV ASTRID

Estaba tranquila, confiaba en que Hipo y los demás tendrían todo controlado. En el momento en el que la habitación se quedó a oscuras con la excepción de la tenue luz procedente de la ventana, supe que ya iban a sacarme de ahí. Un par de segundos después entraron tres hombres, siendo uno de ellos el que me había golpeado antes, que parecía el que controlaba a los demás parcialmente, porque estaba segura de que habría alguien más involucrado en esto pero que no se mancharía las manos haciendo el trabajo sucio. Cuando oí los disparos al otro lado de la puerta solté mis manos de la cuerda que las retenía. Lo hice rápidamente porque el nudo de la cuerda era horrible, y en cuanto lo hice me dispuse a atacar a mis secuestradores. Los tres se habían girado para mirar a la puerta expectantes de lo que pasase al otro lado, por lo que noquear al primero fue sencillo. Los otros dos se volvieron hacia mí al oír el ruido que su compañero hizo al caer al suelo y empezamos a pelear. No atacaban de forma coordinada y yo aproveché eso para ir desplazándome ágilmente para esquivar sus ataques. Cuando conseguí tumbar al segundo, sonreí sabedora de que un enfrentamiento individual sería sencillo y me dispuse a jugar un poco con él como venganza por el golpe que me había propinado cuando yo estaba atada. Ese gesto no había mostrado otra cosa aparte de su cobardía, porque lo hizo cuando yo me encontraba sin posibilidad de defenderme (o al menos eso les tenía que hacer pensar, porque si me soltaba de la cuerda como había hecho ahora, y se lo devolvía al instante, me hubiesen reducido por la gran inferioridad numérica en la que me encontraba, y me hubiesen inmovilizado asegurándose esta vez de que no me podía soltar). Sin embargo, el cese de los disparos en el exterior me hizo saber que tenía que acabar rápido, y eso hice, aunque con un golpe que tan solo lo dejó desorientado. Al observar la silueta de la armadura de Hipo en la puerta me tranquilicé y volví mi atención al hombre para quitarle la consciencia durante un buen rato.

Todo lo que pasó a partir de ahí fue muy rápido, actué de forma automática obedeciendo a Hipo y solo una vez subidos en Desdentao fui capaz de analizar lo que había pasado desde que abrió la puerta de la habitación hasta llegar a este punto. Había oído un disparo, pero asumí que habían fallado porque yo estaba intacta y el agarre de Hipo en mi cintura me aseguraba que él también se encontraba bien. Sin embargo, cuando descendimos de Desdentao y al girarme a ver al ojiverde le observé de rodillas y cayendo por completo al suelo supe que no era verdad, no todo había ido bien.

Heather y los gemelos estaban ahí cuando llegamos, por lo que todos nos acercamos rápidamente a él para averiguar qué demonios pasaba. La pelinegra le quitó rápidamente el casco, lo que me permitió observar su rostro completamente relajado con los ojos cerrados. Estuve varios segundos con la vista perdida, aunque al mismo tiempo detallé con cuidado su cara: todas sus facciones, esas pestañas que coronaban unos párpados que escondían unos ojos de un intenso color verde que sinceramente me habían atrapado más de una vez, su nariz, boca, y esa barba corta pero que no dejaba lugar a dudas, iba a ser realmente densa. Un suspiro de parte de Heather me sacó del ensimismamiento.

-¿Está bien? - pregunté suponiendo que había visto algo.

-No sé, dímelo tú, hasta hace un momento has sido la única que ha estado con él después de los disparos a los que se ha enfrentado, ¿le ha pasado algo? - su tono sarcástico me descolocó por completo estaba a punto de decirla que se dejase de medias tintas y si estaba insinuando algo, que lo dijera directamente, pero antes de hablar se me adelantó - Perdona. No ha sido nada grave, ha recibido un balazo - alcé la ceja preocupada y sorprendida de que se encontrase tan tranquila. Una vez más, se adelantó para hablar - con los años de experiencia, sabemos que esto puede pasar, así que los trajes son blindados, son un poco más incómodos pero mejor incómodo que muerto, ¿no? En fin, no es grave, pero vamos a llevarle dentro, sacamos la bala, y lo analizo mejor - dicho y hecho, entre los cuatro lo cargamos encima de Desdentao y lo llevamos a una de las habitaciones, la cual estaba completamente a excepción de una mesa alargada que no estaba demasiado bien. Lo tumbamos encima, Heather salió un momento de la habitación y volvió con un maletín que resultó ser médico, contenía cosas básicas pero parecía que estaba todo lo necesario en cualquier tipo de urgencia sanitaria. Extrajo la bala del traje y empezó a salir un poco de sangre, por lo que le retiraron la parte superior del traje (lo cual parecía a mí me parecía complicado por lo que les dejé trabajar para no estorbarles) junto con la camiseta que llevaba debajo. No era una herida muy grande, la limpiaron y en un abrir y cerrar de ojos lo habían vendado - la bala es bastante gruesa, el traje la ha frenado parcialmente, pero ha conseguido atravesar. En unas horas despertará, la bala ha debido de presionar durante el viaje hasta aquí y por eso se ha mareado hasta quedar inconsciente, pero no es nada, ha pasado por cosas peores. Puedes marcharte cuando quieras, en cuanto se despierte te avisaremos - me dijo mientras guardaba todo de vuelta en el maletín.

La CatástrofeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora