La Catástrofe

CAP 15: ¿Fácil?

 POV ASTRID

Llegamos rápidamente al cuartel y seguí a Hipo a la habitación de Heather, en la que entró sin detenerse un segundo, ni siquiera para llamar a la puerta que estaba cerrada. La habitación la había visto cuando se las enseñé a ellos, pero ahora mismo parecía una habitación completamente distinta. La cama parecía ser lo único común entre el antes y el después. Un escritorio de madera había desaparecido, aunque seguramente fuese porque estaría en tan mal estado que era molestia más que utilidad. La única ventana que había, estaba tapada por una tela completamente opaca, Heather había colocado un par de luces que eran lo único que iluminaba la estancia, pero tampoco eran demasiado potentes. Vi varios maletines esparcidos por el suelo de la habitación con distintas cosas, la mayoría las podía calificar como material de espionaje, y encima de la cama estaba Heather, con un par de portátiles y unos poco papeles rodeándola.

-¿Has hablado con él? - preguntó a Heather.

-Sí, pero está buscando información, al parecer al ser un traslado extraordinario, no había sido notificado, al menos eso es bueno, significa que hay menos probabilidades de que se hayan enterado los hombres de Drago - mostró una sonrisa que pareció más bien una mueca.

-Sabes que no es así, no tengo ninguna duda de que ya lo sabrá.

-Bueno, lo que sí me ha podido dar es la ruta de los transportes. Dice que nunca cambia, tampoco para los viajes imprevistos - le enseñó la pantalla del portátil que tenía enfrente con dicha ruta.

-De acuerdo. Vas a tener que quedarte aquí a esperar la información que te mande. Voy con los gemelos y me acompaña Cizalladura, Astrid también se viene para que vea qué hacemos - mientras decía eso último, se acercó a uno de los maletines y cogió lo que un segundo después vi que era un auricular - póntelo, ya está en la misma línea que los nuestros, para prevenir cualquier cosa - el auricular era realmente pequeño. De hecho cuando me lo puse, supe que no se vería en mi oreja.

-Sin problema, os voy avisando de cualquier cosa desde aquí. Tened cuidado - respondió Heather, y un asentimiento con la cabeza tanto por su parte como por la nuestra fue el cierre de la conversación.

Al salir de la habitación nos dirigimos a otra que era más grande - la sala de entrenamiento - identifiqué rápidamente. En ella se encontraban los gemelos junto con los tres dragones del grupo más el que estuvo en la tienda de campaña en la que dormí el día que los conocí, estaba jugando con el furia nocturna.

-Si, tuvimos que explorar todo el edificio para saber con qué podíamos trabajar, y esta sala es la única en un estado no muy lamentable para que los dragones estén cómodos.

-¿Por qué está ese Nadder aquí?

-Es una muy buena amiga de Desdentao y su pasado no fue sencillo, se pasa casi todos los días con él, he acabado comprendiendo que sólo está realmente cómoda con él, así que aquí está - se encogió de hombros y apareció una mirada nostálgica en él.

-¿Qué la pasó? - pregunté realmente interesada.

-Quizás algún día te lo cuente, ahora tenemos algo más importante entre manos. ¡Brutacio, Brutilda! A vuestro dragón, es hora de trabajar, os ponemos al día en el camino - se acercó a la Nadder y le dijo - quédate aquí va a ser rápido, cuida de Heather mientras no estamos.

Salimos rápidamente, mis pensamientos estaban al 100% en lo que podía pasar si algo salía mal, por lo que me subí detrás de Hipo inconscientemente y cuando me di cuenta de que estaba volando a pesar del miedo que era consciente que aún estaba ahí, llevábamos varios minutos en el aire. Ya estaba terminando de desaparecer el sol, por lo que en poco rato no se vería nada. Hipo puso al día a los Thorton con la ayuda de Heather para algunos detalles mínimos que el ojiverde se saltaba, y un rato después, mientras trazábamos el recorrido del convoy en dirección contraria a él, Heather nos informó de la posición del transporte y envió a Hipo el rastreador que llevaba el convoy para informar a la Colonia de Europa del Norte, cortesía de la persona a la que se referían como "Bravo". Gracias a un reloj que llevaba Hipo más sofisticado que los viejos Apple Watch, podía ver la posición de los camiones sin que lo fuese diciendo todo el rato Heather.

Cuando los alcanzamos todo parecía bastante tranquilo, pero Hipo, que al parecer conocía bastante bien la formación de estos viajes, no como yo que nunca me había dedicado a estos asuntos, le resultaron extraños un par de coches que iban un poco más atrasados y se acercaban poco a poco.

-Esos no son del convoy. Gemelos poneos detrás de ellos, que no os vean. Nosotros vamos encima de los camiones. Cizalladura, con ellos - le hizo gestos al dragón para acompañar sus palabras y este se fue con los Thorton.

-¿No nos van a ver a nosotros?

-Aquí a un amigo le gusta mucho la noche y se esconde en ella, es casi imposible verle. Y yo, para ayudarle tengo esto - se bajó como unas lentes que estaban en el interior del casco y deje de ser capaz de ver sus ojos - visión nocturna. Ahora vamos a ver que intentan esos coches.

Aterrizó encima del penúltimo camión cisterna, que era seguido por otro más y un coche que si pertenecía al transporte pero que no parecía haberse dado cuenta de los acompañantes que tenían detrás. Después de un minuto esperando encima del camión, pude oír de milagro una especie de silbido muy tenue y un segundo después el coche del convoy derrapó, perdió el control y terminó volcando - silenciadores - deduje.

-Bueno, podemos confirmar que no son del convoy. Nosotros tenemos algo un poco menos silencioso pero igual o más efectivo. Desdentao, plasma - el furia nocturna obedeció y con dos disparos rápidos destruyó los coches hostiles. Un momento después Hipo me informó - Ese camión acaba de dar la alarma al resto del grupo, según el protocolo en un minuto, cuando confirmen el ataque, van a avisar a la Colonia. Si no queremos que Drago moleste en lo que queda de recorrido, hay que decirles que ya no hay peligro. Sígueme - se bajó de Desdentao y fue hacia la cabeza del camión sobre el que estábamos.

-Puedo dar mi rango, esperemos que no piensen que miento

-Justo lo que yo estaba pensando - se metió entre la cabeza y la carga del camión y me ayudó para que me pudiese asomar a la ventanilla del copiloto. Di un par de golpes y tras un momento de sorpresa del conductor y a punto de que avisase por la radio, le convencí de que bajase la ventanilla.

-Soy Astrid Hofferson, teniente del escuadrón número 3 del la Colonia del Sur, no den la alarma, está todo bajo control.

-¿Por qué tendría que creerte? - me preguntó el hombre. Suspiré y pensé "menudo idiota, baja la ventanilla a una desconocida y se preocupa ahora".

-Porque si no, ya estarías muerto. El ataque al coche escoba no ha sido nuestro, pero ya nos hemos ocupado de los atacantes.

-¿Cómo has llegado aquí?

-Información innecesaria por el momento, suspende el aviso a la Colonia. Está todo bajo control y nosotros vamos de apoyo - no quería darle la sorpresa de los dragones para prevenir cualquier accidente y además, si se lo contaba quizás no me creyese y daría el aviso. Al final conseguí que me hiciese caso, nosotros volvimos a subirnos a Desdentao, todos estaban al tanto de todo gracias al auricular que me habían proporcionado, y el resto del camino transcurrió sin ningún nuevo invitado inesperado.

Sin embargo, era muy probable que tuviese que dar muchas explicaciones sobre la "operación" a David al entrar en la Colonia.

-Bastante fácil, ¿no? - le dije a Hipo contenta.

-Eso parece. Drago no esperaría una defensa con dragones, de lo contrario hubiese sido mucho más complicado.

-¿Cómo puedo desactivar un momento el pinganillo? - al preguntarlo, me lo pidió extendiendo la mano y al dárselo pulsó un botón minúsculo que ni siquiera había notado cuando me lo dio, hizo lo mismo con el suyo, porque si no habría sido inútil hacerlo con el mió y me invitó a hablar con un gesto.

-¿Por qué has llevado a Cizalladura en lugar de la Nadder? Podría haberse quedado con su jinete en lugar de ser al contrario.

-¿Sólo era eso?¿Para eso había que desactivar los comunicadores? - me miró incrédulo.

-¿Te esperabas algo más? - alcé una ceja - No sabía si podía ser por algún motivo incómodo para Heather o para ti, era por eso.

-Pues que sepas que es porque Cizalladura conoce bien cómo trabajamos en las misiones, aunque lo tenga que hacer sin su jinete - Aterrizamos junto a los camiones que acababan de aparcar y vi como Charles, la mano derecha de David, se acercaba a mí.

-No me equivocaba, me espera una larga noche - dije más para mí, pero Hipo obviamente me escuchó y me miró extrañado.

-¿Qué?