Mαƙɳαҽ Lιɳҽ

ᴀᴛᴛᴇɴᴛɪᴏɴ

-Cuando buscan tu atención-

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JIMIN

Estabas absorta en lo que escribías en la pantalla, tu inspiración estaba al borde del colapso y estabas apunto de entrar en una crisis.

Fue entonces cuando escuchas la melodiosa voz de tu novio al ingresar al estudio, este empezó a cantarte "filter" al oído mientras deja un beso en la parte trasera de tu oído. Sentiste una corriente recorrer todo tu cuerpo, tu sistema reacciono a sus acciones.

-Princesa, vamos a ver una película. Haz estado todo el dia aquí y no compartiste conmigo-Susurra esté mientras masajea tus hombros. Sueltas un suspiro y dejas caer tu cabeza sobre su firme pecho.

-No puedo, si me detengo ahora mandaré esto al diablo-Dices, y abres tus ojos encontrandote con sus labios hechos un puchero-Jimin, no me hagas esa cara.

Adviertes, entonces él empieza acercar su rostro al tuyo mientras no quita el puchero de sus labios. Le apartas con un suave empujón para volver a incorporarte y continuar.

Es ahí cuando sientes un jalon en tu brazo, lo miras un tanto molesta mientras el sigue insistiendo en que te levantes.

-Solo me sentare contigo-Murmura Jimin al ver tu gesto severo sobre él. Sueltas un resoplido antes de pararte y dejarlo sentarse en tu lugar, cuando este ha logrado su cometido te toma de las caderas para que te sientes sobre él.

Jimin guarda silencio y entonces tu sigues en tu trabajo, aunque su presencia complicaba todo un poco más. Era imposible poder concentrarte cuando estabas sentada sobre él, sabías que cualquier movimiento en esa posición era extremadamente peligroso.

-Park Jimin-Sueltas en advertencia una vez más. Intentas apartar sus manos que empezaron a adentrarse dentro de tu camisa, el hace resistencia aferrándose fuertemente a tu cintura atrayente a él en un abrazo.

-¿Te pongo nerviosa?-Le oyes cuestionar, y seguido a ello sientes como su lengua se desliza por tu cuello.

Cierras tus ojos y muerdes tus labios fuertemente evitando soltar el jadeo que casi sueltas por inercia, no era momento de caer en su juego.

-No tengo inspiración, y no me estás ayudando-Tu mandíbula se aprieta con fuerza, mientras las manos de Jimin siguen acariciando hasta llegar a tus costillas. Lo siguiente que sabes es que sus manos están acunando tus pechos.

-¿Crees que esto es poco?, podrías estar escribiendo cosas muy calientes con este material-Ronronea, incluso puedes jurar que tiene una linda sonrisa traviesa.

Aún así, estaba sacándote de tus casillas. Primero, por que no sabías como sentirte y segundo porque tu jamás te ponías tan pegajosa cuando él estaba ocupado en sus cosas.

Esta última cuestión te puso extremadamente furiosa, porque él no hacía el intento para cooperar y menos por entenderte.

Empujando tus caderas hacia atrás, apesar de que esta parecía la bandera verde que esperaba Park Jimin, fue más bien la infracción de sus actos. Levantandote del asiento, acomodando furiosamente tu camiseta y sintiendo a tu rostro arder en cólera; dijiste algo de lo que ibas a arrepentir después.