quince

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INSOMNIO.

No puedo permitirme dormir sabiendo que estás en el hospital. Lucho en la decisión, al final me digo a mí mismo que esta reacción es por mi genuina preocupación por ti.

El cincuenta por ciento de mi cerebro, piensa en ti, y abrazo a tu madre que llora desconsolada, empapado en sus lágrimas.

Tu padre no dice ninguna palabra, tan callado que me hace mal verlo sin su típica expresión risueña.

Nos destrozas a todos. Contaminas tu entorno porque no quieres dejarlo... y lo entiendo. ¿Te amenazó, verdad? Te dio inseguridad. Te asusta porque no quiere que le traiciones. ¿Te ofrece dinero ppr tu silencio?

Lo veo capaz de cualquier cosa.

Y me confieso ante tu madre. Le cuento que esto es por culpa de él. Estás inestable, débil, sola y que te necesitaban más que nunca. Si tú no rompes el silencio, lo hago yo.

—Creo que no ha dicho nada porque está aterrada... Y yo también.

—El médico nos dijo que vio sus moretones, sus heridas creímos que... eran autoinfligidos. Creímos que...

Solloza. Solloza fuerte y dejo de entender que estaba diciendo. La vuelvo a abrazar hasta que ellos van a visitarte a tu habitación. Te han lavado el estómago, solo necesitas descansar.

Y luego la llamo a Stephanie. Necesito hablar con alguien. Necesito... y necesitar me vuelve débil.

—Stephanie, ¿podemos vernos?

Una voz ronca, rasposa, cargada de una tristeza que ella entiende a través de mi respiración.

100 ways + kim tae hyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora