- Lo siento - ¿A qué viene eso ahora? - preguntó Jughead - Está claro que te ha molestado que besara a Archie en el jacuzzi – expliqué - No, solo que... - No me mientas - interrumpí - Para serte sincero, sí, me ha molestado. No sé, ver como os cogíais y que parecíais que... Bueno, nada, que me da miedo que otro te guste más que yo, que te haga más feliz y que me dejes. - ¿Por qué piensas eso? Eres increíble y nadie me hace más feliz que tú y te lo voy a demostrar.
Me quité el albornoz que llevaba puesto dejando al descubierto una ropa de interior de encaje que estaba haciendo que su novio fantaseara.
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El pelinegro no se anduvo con tonterías y tras un rato de sonidos de placer que se retumbaban en la habitación, los dos llegamos a lo máximo. Me recosté a su lado abrazándolo y dejé tiernos besos por su pecho.
- Te quiero más que a nada en el mundo – susurré justo antes de dormirme entre sus brazos. - Yo también te quiero – respondió dejando un suave beso en mi frente.
