Capítulo 16: Te Deseó

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RENATA

─Erick... ─dije en un susurró mientras él seguía besando mi cuello

─¿Que? ─preguntó volviendo a besar mis labios

─Deberíamos irnos. Tengo frío. ─confesé con timidez, siempre soy yo quién arruina estos momentos, pensé.

─Claro, vamos. ─respondió con una sonrisa y me ayudó a salir del agua para luego vestirnos, bueno al menos yo tengo ropa seca pero él está todo empapado gracias a mi, cuándo termine de ponerme mis zapatillas él tomó mi mano y no la soltó durante todo el trayecto de vuelta y entre risas y besos el camino a casa se hizo corto.
Cuando llegamos a nuestro edificio ambos subimos el elevador y decidimos ir primero al departamento de Erick para que pudiera ir por ropa limpia y seca para que se bañara en mi casa, le insistí tanto en que volviera a quedarse está noche que él pobre no tuvo opción, apenas es sábado y sino disfrutamos nuestros días libres, luego es algo difícil coincidir en la semana, en fin, cuándo por fin llegamos a mi piso, el elevador se abre y lo primero que veo cuando levanto la vista, es a Joel esperando en la puerta de mi casa. Hasta que aparece, llevó semanas sin saber nada de él, desdé la noche de la fiesta, para ser exactos.

─Vaya, hasta que llegas. ─noto la molestia en su voz

─Hola Joel, ¿Cómo estas? ─hago una pausa y prosigo al no obtener respuesta alguna de su parte ─A..., Ok, ¿Se puede saber que te pasa?

─Bueno. Mejor los dejo para que hablen, me llamas cuando te desocupes, linda. ─dice Erick dejando un beso en mi frente para luego dar media vuelta e irse a lo que noto que Joel no deja de dar vueltas en el pasillo, lo conozco demasiado bien y si está así es por algo que lo está afectando demasiado.

─No es necesario, puedes quedarte. ─le pido y Erick asiente pero se queda a una distancia moderada de nosotros, vuelvo a mirar a Joel y este está como ido ─¡Joel! ─exclamó y él vuelve en sí

─Ren... Yo lo siento. ─dice Joel y puedo notar lo nervioso que está por la forma en cómo desordena su cabello, yo sólo asiento y tomó su mano como siempre lo hago cuando se que él lo necesita ─Necesito que hablemos. ─dice él y por la forma en la que me lo pide se que es serio

─¿Que pasa? ─preguntó, pero Joel ignora mi pregunta al percatarse de la presencia de Erick a unos cuantos metros de nosotros

─¿Quién es él? ─pregunta fulminando a Erick con la mirada, ¿Que le pasa hoy a Joel?

─Oh se me olvidó presentarlos, Erick ven. ─lo llamé y él se acercó a nosotros ─Erick, él es Joel, mi mejor amigo. ─digo con una sonrisa y me separo de Erick para abrazar a mi amigo

─Un gusto, Joel. ─dice Erick y estrecha su mano con la de Joel y este le sonríe con gentileza

─Y Joel, él es Erick, mi novio. ─miró a Joel con una sonrisa mientras tengo mi mano apoyada en su cintura y siento como su cuerpo se tensa ante mi confección, podría hasta jurar que se le fue el color de la cara, todo rastro de alegría se esfumó de su rostro por completo. De los años que llevo siendo su amiga es la primera vez que lo veo ponerse así, él me mira a los ojos y puedo verlos inyectados de sangre y cristalino, no se que le sucede pero en efecto no me gusta ver a este Joel, se lo ve tan vulnerable, tan dolido, quisiera saber qué es lo que lo tiene tan atormentado.

─¿Que? ¿Cómo que es tú novio? ─asiento con la cabeza ─No... No puede ser. ─dice y se aparta bruscamente de mi lado y clava su mirada nuevamente en mi, pero esta vez sus ojos se obscurecieron, me mira con decepción y deja caer una lágrima por su mejilla, no logro entender que le está pasando.

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