Apareciste Tú: El Romance #ERENA1

Capítulo 33: Nuestro Último Día Juntos

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RENATA

Anoche realmente no sabía como hablar con Erick sobre esto, no encontraba el momento u las palabras precisas para decirte que, me voy.
Es algo que sólo dudará en el período vacacional, luego regresaré, pero se para él será muy difícil estar lejos de mi durante ese tiempo, para mi también lo será. ¿Que loco, no? Hace poco más de un año cuando subí un avión para mudarme aquí deseaba con todas mis fuerzas que llegará ese día, regresar a casa, puesto que no quería estar lejos de mi familia, sin embargo hoy, no quiero irme y se que suena mal porqué se trata de ver a mi familia, a quienes no veo desdé hace mucho, pero me he acostumbrado tanto a mi vida aquí, y sobre todo a Erick, a dormir por las noches en mi cama con el abrazándome, a despertar con sus besos, en resumen, me he acostumbrado tanto a tenerlo todo el tiempo conmigo que temo que este tiempo lejos, lo hechare de menos como a nadie en la tierra.

Extrañaré estos despertares entre sus brazos, comenzar las mañanas entre risas y besos, y bueno como en muchas ocasiones, con un buen mañanero para arrancar bien el día, como hoy.
Extrañaré despertar todos los días durante un tiempo y no verlo a mi lado.

Después de un rato de risas decidimos dormír otro rato, hoy es sábado y Erick no trabajaba, además nuestros cuerpos exigían descansar como es debido, y el día lluvioso y frío eran una buena excusa...
Cuándo despertamos el reloj marcaba las 18:11 de la tarde, vaya si que habíamos dormido. Decidimos levantarnos debido a que nuestros estómagos rugian pidiendo ser alimentados, así que mientras yo me daba una ducha, él quiso prepar algo de comer para ambos, comimos juntos mientras veíamos una serie.
Más tarde me ayudó con la limpieza de la casa, era un caos empezando por la cocina y terminando por mi habitación. Cuándo terminamos de limpiar y ordenar era casi media noche.

─¿Que planeas hacer mañana, nena? ─preguntó él cuándo ambos caímos rendidos en la cama.

─Pues, sólo empacar..., pero lo haré en la noche, ¿Por que? ─agregué y él inmutó una pequeña sonrisa mientras se metía entre las sábanas.

─Quiero que pasemos todo el día fuera, juntos, ¿Quieres?─preguntó él y me robo una sonrisa

─Claro que quiero, eso ni se pregunta, cariño. ─le respondí con una sonrisa

─Descansa cariño, hasta mañana. ─dijo y dejo un beso en mis labios, y acto seguido colocó su cabeza en el hueco de mi cuello, dónde quedó profundamente dormido.

DOMINGO, 09:17 AM.

─Buenos días bello durmiente. ─le dije a Erick en el oído y bese sus mejillas para despertarlo

─Hola. ─dijo él con una sonrisa y me beso los labios aún con los ojos cerrados.

─Ya esta listo el desayuno, dijiste que hoy pasaríamos el día fuera. ─digo y toma su celular rápidamente supongo que para ver la hora, cuando lo hace se levanta a tropezones de la cama y se mete al baño sin siquiera decirme media palabra.

─Erick, ¿Estás bien? ─pregunté desdé el otro lado de la puerta del baño, dónde ahora se escucha la ducha que está encendida.

─Sí nena, ahora estoy contigo. Ve desayunando.

No le respondí nada y me límite a tomarle la palabra, la verdad es que si tengo demasiada hambre como para esperarlo.